La UEFA se ha convertido en el mejor aliado de Florentino Pérez en su objetivo de cubrir el hueco que dejó vacante Cristiano Ronaldo con un crack de relumbrón de primer nivel.
Mientras avanza en su negociación por Hazard, que vestirá de blanco la próxima temporada sí o sí, la UEFA se lo ha puesto fácil a Florentino presionando al PSG para que saque dinero debajo de las piedras si desea cuadrar sus cuentas de acuerdo al Plan del Fair Play Financiero.
El PSG necesita un ingreso de 170 millones de euros derivados de su actividad ordinaria. Y no los va a conseguir vendiendo a Adrien Rabiot, que se irá al Barcelona el próximo 1 de julio sin dejar un euro en caja, en lo que se ha llamado la venganza de Bartomeu por Neymar.
¿Será Neymar o será Mbappé el que salga?
La cuestión es qyue el balance del PSG presenta un desfase de 170 millones que el club parisino debe cuadrar de forma inmediata si no quiere tener problemas. Y no parece que exista otra solución que poner a la venta a una de sus estrellas. Puede ser Neymar o puede ser Mbappé.
Y esta es la gran duda que tiene el PSG. Neymar ofrece al club parisino visibilidad por el gancho mediático que tiene y que acapara la atención del mundo entero. Sin embargo, Mbappé ofrece garantías deportivas de futuro. Menos visibilidad, pero más rendimiento. Y el PSG tiene que elegir al jugador del que va a desprenderse.
A Florentino Pérez le gustan los dos, aunque puestos a elegir se quedaría con Mbappé, por su edad, por su condición de madridista y por lo que se le adivina, que no es otra cosa que el jugador que va a marcar una época en la próxima década.
Según afirmó Mediapart a partir de datos obtenidos de Football Leaks, el PSG necesitaría recaudar 170 millones de euros el próximo verano si quiere sanear sus cuentas e impedir así cualquier tipo de sanción por parte de la UEFA.
La UEFA tiene en su punto de mira a las financias de la entidad parisina. El conjunto francés aseguró que el contrato con la Oficina de Turismo de Qatar generaba 145 millones de euros, pero finalmente se quedó en 58.
Además, la UEFA aseguró que ya no permitirá más la multiplicación de los contratos con Qatar y que limitará los ingresos a 36 millones de euros, lo que haría que el club perdiera unos 100 'kilos' por año.
Y mientras tanto, Florentino se frota las manos.