La UEFA le toca la cresta al Barça: "¡Basta ya de tabarra política!"

La UEFA advierte con multas al FC Barcelona para que tome las medidas necesarias y consiga que el Camp Nou deje de ser un espacio de reivindicaciones políticas.

12 de Diciembre de 2018
La UEFA le toca la cresta al Barça: "¡Basta ya de tabarra política!"
La UEFA le toca la cresta al Barça: "¡Basta ya de tabarra política!"

El delegado de la UEFA presente ayer en el Camp Nou para redactar su informe acerca de las incidencias del partido de Champions League que anoche enfrentó al FC Barcelona con el Tottenham inglés, ha trasladado al club azulgrana el descontento de la UEFA con las manifestaciones políticas que la directiva de Josep Maria Bartomeu permite en el Camp Nou. 

La UEFA está harta del politiqueo del Barça

La UEFA ha instado al FC Barcelona a que tome medidas y acabe con las reivindicaciones políticas que partido tras partido se suceden en el Camp Nou en favor de los políticos encarcelados y reclamando siempre una supuesta libertad perdida que no se ajusta a la realidad.

El máximo organismo futbolístico europeo entiende que no puede utilizarse su competición principal para reivindicar asuntos políticos que nada tienen que ver con el deporte. Nada más alejado de la aspiración de la UEFA, que trata de impulsar los valores de deportividad, juego limpio y stop al racismo que nada tienen que ver con las aspiraciones independentistas de unos cuantos ni con la situación de los politicos presos que esperan a que la justicia les imponga la pena que merezcan.

El Camp Nou es la mejor caja de resonancia para el separatismo

El independentismo se moviliza cada vez que el Barça juega un partido de Champions League en el Camp Nou buscando propagar su mensaje aprovechando el eco internacional que acompaña el Barça en sus partidos. De esta manera se pretende utilizar al Barça para externalizar el conflicto que los separatistas mantienen con España.

Ayer desplegaron una pancarta gigante, escrita en inglés, en la que se podía leer: "Sólo las dictaduras encarcelan a los líderes politicos pacñificos", mientras otra reclamaba "Libertad para Cataluña". Entre los radicales barcelonistas se desplegó otra pancarta en la que se podía leer: "Apoyo a la huelga de hambre por la libertad". Luego, durante el partido, en el minuto 17 y 14 segundos de cada parte pudieron oirse los tradicionales gritos de "In-De-Pen-Dencia" unidos al de "Libertad Presos Políticos", como sucede en cada partido del Camp Nou. Gritos que cada vez obtienen una mayor respuesta en forma de silbidos por parte de esos catalanes y barcelonistas que no están de acuerdo ni con la utilización que se hace del Barça con fines partidistas ni con el enfoque sectario que se le da al tema. 

La sociedad catalana no es el reflejo de lo que se ve en el Camp Nou

No hay que olvidar que el Camp Nou debería ser un reflejo de la sociedad catalana, en la que el independentismo jamás ha obtenido la mayoría social. Por tanto, los que no comparten el criterio de utilizar el Camp Nou para satisfacer los caprichos del independentismo son también mayoría, aunque los gritos de cuatro puedan indicar lo contrario.

Anoche el independentismo se movilizó. Primero en las redes sociales y luego en las puertas del estadio, en donde se repartieron bufandas de papel amarillas y pasquines con reivindicaciones: “Digamos basta a la represión! Si vas a ver el # BarçaTottenham de @ChampionsLeague, consigue tu banderola #IndependenceIsFreedom, o saca la estelada, para reclamar la #Llibertatpresospolitics y mostrar tu solidaridad con la #vagadefam al inicio y al # Minut1714″.

A Bartomeu se le ha ido el tema de las manos

Al presidente Bartomeu, que no pasa precisamente por ser indeopendentista, se le ha ido el tema de las manos agobiado por las presiones que recibe para poner al Barça al servicio de la secta separatista. Pero alguna medida deberá adoptar de cara al futuro después del toque de atención con la UEFA, con la que meses atrás hizo las paces por la exhibición de esteladas en la grada que le reportó al club multas muy elevadas. La UEFA vuelve a decir "¡Basta!" y amenaza con nuevas sanciones si el club no corta de raíz esta muestra de antideportividad en un recinto que sólo debería ser deportivo.