Ha sucedido en México.
Mientras un hombre intentaba activar los sistemas de aspersor del cultivo de su granja, resbaló y cayó al lago cercano.
La mala suerte quiso que el hombre no fuese capaz de salir a superficie, ahogándose en el agua antes de que nadie se diese cuenta de su accidente.
Excepto Mhee, su perro y fiel amigo.
No se separó de la orilla en ningún momento
El can, angustiado y llorando, miraba al fondo del lago, donde había visto desaparecer poco antes a su dueño.
Sin embargo, nada pudo hacer Mhee para rescatar a su amo. El equipo de buceo tardó diez minutos en encontrar el cuerpo sin vida del hombre de 56 años.
Un vídeo que demuestra, una vez más, que el amor de las mascotas no encuentra límites.