El Real Madrid ganó la ACB en la temporada 2004-2005 tras ganar en el quinto partido al TAU Cerámica. Los blancos completaron una remontada épica en el último minuto para llevarse el trofeo a la capital de España.
Era el quinto encuentro de la final y el TAU Cerámica ganaba por 69-61 al Real Madrid cuando quedaban 50 segundos para el final del partido. Todos daban por hecho que los blancos perderían pero el club blanco silenció el pabellón.
Cuando quedaban 39 segundos para el final, el Real Madrid recortó distancias con un triple desde el lateral (69-64). Tras el fallo de Scola en la siguiente jugada, Hamilton volvió a recortar distancias con una canasta de dos puntos (69-66).
Quedaban menos de 20 segundos y el TAU Cerámica, nada más sacar de fondo, perdió el balón por una imprecisión. El equipo local, para evitar el triple del Real Madrid, hizo una falta personal sobre Sonko, que transformó uno de los dos tiros libres (69-67).
EL TAU CERÁMICA Y LAS IMPRECISIONES
El TAU Cerámica, que tenía la última posesión con el marcador a favor, perdió el balón con una nueva imprecisión en el saque de fondo. Eso le dio al Real Madrid la posibilidad de disfrutar de una última jugada para ganar.
El Real Madrid quiso consumir la posesión para jugársela a un tiro y no dar opción al TAU Cerámica. El elegido para lanzar fue Alberto Herreros que, desde la línea de tres, silenció el pabellón cuando quedaban 6,4 segundos y desató la locura en el banquillo madridista.
El equipo local, a la desesperada, se fue a por una canasta que les diese la victoria pero el Real Madrid defendió bien esa última ofensiva y ganó una de las ligas más igualadas de la historia.