La reina Sofia no se lleva ni con Leticia ni con Marichalar

El libro 'Sofia, nuestra reina" publica los conflictos de Jaime Marichalar en la Casa Real.

La reina Sofia no se lleva ni con Leticia ni con Marichalar
La reina Sofia no se lleva ni con Leticia ni con Marichalar

Carmen Enríquez ha hecho temblar los cimientos de la Casa Real con la publicación de su libro: “Sofia, nuestra reina”. Hoy se han publicado unos fragmentos que no dejan indiferente a nadie y que destapan su relación con los demás miembros de la Zarzuela.

"La reina Sofía nunca estuvo convencida de que Jaime de Marichalar se casara con su hija por amor, sino que siempre creyó que le movieron otros intereses. A eso se tiene que añadir que no le gustaba el trato que la hija recibió del marido durante el tiempo que estuvieron unidos en matrimonio", explica a modo de ‘bomba’ la escritora del libro.

“Le movieron otros intereses”

"La Infanta estaba muy disgustada al ver llegar a su marido al domicilio conyugal a la misma hora que ella se levantaba para acompañar a los hijos al jardín de infancia. Mientras que Jaime prefería trasnochar y hacer presencia en cualquier acontecimiento social, la mujer optaba por retirarse pronto. Después de más de dos años de vivir separados, la infanta Elena se divorció", sigue explicando el libro sobre la relación rota entre Sofia y Marichalar.

“Acto de rebeldía de la Reina”

"El rey Juan Carlos se enfadó mucho y también los responsables de la Casa. Consideraban un acto de rebeldía de la Reina el hecho de que hubiera aceptado hacerse aquella foto sin tener en cuenta la avalancha de críticas tan feroces que vinieron después".

"La reina optó por apoyar a su hija, creía que no se le tenía que apartar de la vida institucional hasta que no se demostrara su culpabilidad. La infanta Elena y ella compartían la tesis que todo era un complot contra la Casa Real y que lo que se decía en los medios de comunicación no podía ser verdad", argumentó.

La escritora del libro también explica la aparición de Corinna Larsen: "Trascendió que una mujer joven, rubia y muy atractiva había ido. La reina Sofía sufría por partida doble. Por una parte por los problemas de salud del marido que le tenían preocupada, y por otro los rumores con cada vez más peso del ascendiente de la señora Corinna Larsen", finaliza en alguno de los escritos ‘filtrados’ de su libro.