Siguiendo el peor de los ejemplos del totalitarismo y fascismo, los radicales independentistas catalanes 'niegan' y cargan contra cualquier tipo de ideología que sea contraria a la que ellos intentan imponer en su 'territorio'.
Así pues, en toda la autonomía catalana, en manos de un Govern secesionista que apoya con su silencio a los radicales en las calles, parece reinar una amenaza velada contra todos aquellos constitucionalistas que se nieguen a aceptar las premisas independentistas, el abandono del castellano, o se postulen en contra de la división. Una amenaza que se hace cada vez más real. y es que, a medida que mengua la fuerza del movimiento nacionalista catalán, los pocos que aún lo defienden lo hacen aún con mayor fuerza y violencia en las calles.
El odio indepe a España se traduce en todos los idiomas menos al castellano
Algo que han podido comprobar este domingo desde la plataforma 'Escuela de Todos' en su carpa, instalada este domingo en el paseo marítimo de Cambrils para informar a los ciudadanos y recoger firmas para que se cumpla la sentencia del 25% del castellano en las encuestas impuesta por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña y amparada por el Tribunal Supremo.
Y es que, durante la mañana, fueron varios los independentistas radicales que, negándose a que los ciudadanos tengan el derecho a decidir sobre la escuela de sus hijos, atacaron a los voluntarios presentes en la carpa, a los que tildaron de "fascistas", "charnegos" o "mentirosos y manipuladores", entre otros.
Más de 300 familias se enfrentan al fascismo indepe
Pero la violencia y las amenazas de los radicales independentistas cada vez tiene menos relevancia para los ciudadanos catalanes que, cansados del totalitarismo independentista, cada vez se enfrentan más al 'poder establecido', negándose a seguir aguantando el fascismo rupturista independentista.
Así pues, tal y como ha podido saber el diario digital 'elcatalan.es), ya son más de 300 las familias que han reclamado la ejecución de la sentencia respecto al 25% en castellano que gestiona 'Escuela de Todos'.
Familias que con su firma se han enfrentado, no solo a los radicales que se han acercado a las carpas informativas, sino también a algunos ayuntamientos independentistas como el de Vic, que se negaba a dar permiso a la colocación de la carpa en la localidad barcelonesa asegurando que es un proyecto "contrario a la moral".