Luis Enjuanes, investigador del CSIC, ha hablado con Antonio García Ferreras para el programa de La Sexta 'Al Rojo Vivo'.
Enjuanes ha destacado algo que ya avisó Fernando Simón, y es que antes los asintomáticos eran el 14% de los infectados y ahora son un 45% de los casos detectados.
Por este motivo, hay que preguntarse por la eficacia los controles e aeropuertos para la detección de casos.
El Gobierno defiende que se están aplicando las medidas europeas, que son "una garantía".
Según el científico, el 45% de los casos detectados son asintomáticos, por lo que los controles aplicados en los aeropuertos tienen una "utilidad relativa": "Es mejor eso que nada, pero si al principio los asintomáticos eran el 14%, ahora son el 45%".
"El 45% de los viajeros que llegan podrían estar infectados, aunque se les apliquen algunas medidas como interrogatorios o tomar la temperatura, no se identificarían", ha explicado Enjuanes.
Controles en los aeropuertos
Con la nueva normalidad del pasado 21 de junio y la reapertura del turismo europeo, Sanidad puso en marcha tres controles primarios.
En el primer control, todos los viajeros deben rellenar un formulario de localización llamado 'Passenger Location Card', que también se usa en los vuelos nacionales y en el que se especifican los datos de localización de la persona y si ha pasado el virus.
En segundo lugar, a los pasajeros que llegan de otros países se les toma la temperatura mediante cámaras termográficas. Si alguno de ellos no superase estos controles, el viajero será atendido por un médico de sanidad exterior, quien decidirá si se deriva al paciente al servicio sanitario español.
Por último, se hace un control visual. Si alguno de los viajeros da positivo, pasaría un chequeo médico más exhaustivo. "Pasamos a un control secundario, ya a cargo de sanidad exterior", afirmó el ministro de Sanidad.
Para garantizar la seguridad en el viaje, los pasajeros tendrán que estar con mascarilla durante todo el trayecto y con las medidas de prevención recomendadas en todos los espacios. Es por ello que en los lugares comunes de los aeropuertos hay asientos precintados y dispensadores de gel.