Las desavenencias de Isabel Díaz Ayuso con diferentes líderes políticos a lo largo de su, de momento, corta pero intensa carrera política no es ningún secreto. Durante sus dos años como presidenta de la Comunidad de Madrid, Ayuso ha sabido conjugar los ataques dirigidos hacia otros líderes con los destinados a la oposición de su gobierno en la Asamblea de Madrid.
Por tanto, no es de extrañar que la relación personal y política que Díaz Ayuso mantiene con el presidente del Gobierno sea "mejorable". Las diferencias ideológicas son solo la punta del iceberg de esta relación de enemistad política que une a Pedro Sánchez con Isabel Díaz Ayuso. Además, la llegada del confinamiento y la pandemia acentuó las diferencias entre ambos gestores públicos.
La propia Díaz Ayuso lo explicó en su visita a El Hormiguero, en el mes de noviembre del año pasado. Allí confesó que su forma de contactar con el presidente de nuestro país no es por teléfono, precisamente. A pesar de que mantienen una "relación cordial", Ayuso siempre ha señalado que nunca coincide con Pedro Sánchez en su forma de percibir el mundo: "Es una persona muy segura de sí misma, pero luego sabes que te está mintiendo".
En su visita al programa de Pablo Motos, la presidenta de la Comunidad de Madrid no desaprovechó la oportunidad de resaltar los defectos de Pedro Sánchez, especialmente a raíz de la pandemia. Las diferencias entre la líder autonómica y el presidente del Gobierno se han ensanchado en este momento de crisis, puesto que Díaz Ayuso sostiene que Pedro Sánchez "permite que entre las Comunidades Autónomas nos peguemos".
Los cruces de declaraciones entre ambos líderes son solo la punta del iceberg de una relación que es simplemente cordial, pero que se convierte en la más pura rivalidad dentro del ámbito político. Diferentes muestras de esta dura rivalidad entre ambos son las escasas apariciones públicas en conjunto, que siempre se han forzado hasta el extremo y con una distancia considerable entre ambos políticos.
La actitud general de Sánchez en política también es otro aspecto criticable para la presidenta de la Comunidad de Madrid, que asegura que detesta la "falsa moderación" por la que parece guiarse el presidente del Gobierno. La relación entre ambos políticos no parece mejorar con el paso del tiempo, y el desarrollo de los acontecimientos en el PP parece haber ahondado en las diferencias entre el líder del PSOE y de nuestro país y la presidenta de la Comunidad de Madrid.