Iván Redondo es el principal asesor del líder socialista Pedro Sánchez desde hace dos años y su estrategia está siendo clave para mantener en el poder al actual presidente del Gobierno.
Según Vozpópuli, Redondo lleva varios meses aplicando una estrategia con la que pretende asegurar el apoyo de las fuerzas minoritarias que tienen representación en el Congreso de los Diputados.
La táctica es tender la mano tanto a los partidos nacionalistas (ERC, Bildu...) como a Ciudadanos, formación liderada por Inés Arrimadas y pactar con ellos en función de cada momento político.
Esta estrategia política, a la que la citada fuente denomina "geometría varibable", consiste en un doble juego constante para tener contentos a los partidos citados anteriormente y que estén a su favor.
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"Quieren que todos coman de la mano de Sánchez", han explicado a Vozpópuli fuentes del Gobierno de España, que han hecho una llamativa diferencia entre José Luis Rodríguez Zapatero y Pedro Sánchez.
"Zapatero quería dejar su huella en la historia del país: pasar por el presidente que resolvió la cuestión territorial, acabar con ETA y ser referente de los derechos civiles. La crisis económica se lo llevó por delante, pero Sánchez tiene otro perfil. Lo suyo es un juego de partido a partido, resistir sin mirar lejos. Es una diferencia sustancial", han comentado.
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La idea es "resistir" en el Gobierno
Siguiendo las directrices de Redondo, Pedro Sánchez se ha reunido con ERC, Bildu y Ciudadanos por separado, ha iniciado negociaciones con ellos y se ha hecho la 'foto' para mostrar su afinidad con las citadas formaciones políticas.
El asesor de Pedro Sánchez está convencido que, siguiendo esta 'hoja de ruta', el líder socialista logrará aguantar los cuatro años en la Moncloa y sacará adelante las reformas que quiera.
Es una estrategia rastrera ya que, al fin y al cabo, el Gobierno de España jugará a dos bandas con Ciudadanos y nacionalistas. Asimismo, para tenerles contentos, tendrá que hacer polémicas concesiones que generarán debate y conflicto en el Congreso.