La previa de la Supercopa se calienta y Vinicius Jr. le pega un revolcón brutal a Dembélé

Los dos extremos están señalados como figuras en el Clásico pero la realidad es que el madridista mejora en todo al blaugrana

La previa de la Supercopa se calienta y Vinicius Jr. le pega un revolcón brutal a Dembélé
La previa de la Supercopa se calienta y Vinicius Jr. le pega un revolcón brutal a Dembélé

Esta noche, el Real Madrid y el Barcelona se ven las caras en el primer Clásico del 2022. El partido tiene un sabor algo descafeinado al jugarse en Arabia Saudí en una competición menor como la Supercopa de España, pero el ambiente se ha ido calentando poco a poco en las últimas horas.

Los medios ya han empezado a hacer sus especulaciones sobre el favoritismo de los equipos, claves tácticas y los jugadores a seguir. La mayoría de ellos, al menos los que no están en Barcelona, apuestan claramente por los de Ancelotti. Pero ha habido algunos como el tertuliano de El Chiringuito Cristóbal Soria, que se ha atrevido a señalar al Barça como el principal candidato y ha comparado a los jugadores, afirmando que Dembélé está al mismo nivel de Vinicius. El madridista no tiene que decir nada, los números le defienden por sí solo.

14-1

Comparar a Vinicius con Dembélé debería estar penado con la inhabilitación para opinar de fútbol por unos cuantos años. Es cierto que ambos juegan en el campo en una posición semejante y tienen un físico parecido, pero su rol en el equipo y, sobre todo, el nivel que están mostrando esta temporada, es totalmente diferente.

Vinicius es la gran estrella de Europa en estos momentos por sus exhibiciones jornada tras jornada. El pasado sábado, después de volver del covid, le marcó un doblete al Valencia en el Bernabéu para alcanzar los 14 goles este año entre todas las competiciones. 12 en Liga y otros dos en la Champions. El portal de tasación de futbolistas Trasnfermark le colocó recientemente como el tercer jugador más valioso del mundo, con un precio estimado de 100 millones de euros.

La temporada de Dembélé solo pude calificarse como decente sí se es amigo íntimo del jugador. El francés, más habitual de la enfermería que del césped, ha marcado un solo gol esta temporada, en la Copa del Rey ante el Linares de Segunda Real Federación. En Liga lleva un rosco, igual que en Champions, a donde no volverá esta campaña.

Además, el rol de los jugadores en el equipo es totalmente distinto. Vinicius es el encargado de lanzar las contras con carrera fulgurantes y buscar la asociación con Benzema, el mejor socio posible de cualquier delantero. Dembélé en cambio, es un futbolista anárquico, que muchas veces se va de los partidos y desaparece totalmente. En Barcelona intentan vender que tiene nivel de estrella, pero la verdad es que lo único que esperan es que llegue algún club ingenuo y cargado de dinero a intentar fichárselo.

Amor al club

Sin duda alguna, el aspecto en el que más difieren los dos extremos es en el compromiso. Vinicius ha peleado muy duro desde el principio, recibiendo críticas e insultos, pero no ha bajado la cabeza, no ha dejado de intentarlo en algún momento, y ahora que las cosas le salen, tampoco se da aires de superstar y sigue enfocado en mejorar. Al brasileño le encanta mostrar su madridismo con gestos a la grada, besándose el escudo, y los aficionados le han acogido como uno más de la familia merengue.

Dembélé es, por decirlo suave, un díscolo. El jugador lleva cuatro años en Barcelona y se le conoce más por sus partidas a la Play Station que por sus actuaciones en el campo. El francés ha llegado tarde a entrenamientos por quedarse toda la noche jugando a videojuegos y no tiene una relación especial con ningún compañero. Su negativa a renovar para marcharse a final de temporada tras no haber hecho absolutamente nada en el Barcelona es la última falta de respeto que Dembélé les tiene preparada. Un bala perdida que no le llega ni a los tacos a Vinicius.