El Real Madrid ha tomado una decisión que puede marcar el futuro del club. Florentino Pérez tuvo claro hace tiempo que no podía competir con los clubes-Estado, como el Manchester City o el PSG, entre otros. Potencias que cuentan con una economía basada en el apoyo de jeques.
El club blanco es de los socios, Florentino lo ha dicho una y mil veces. Y mientras él mande nadie podrá meter mano en la entidad deportiva más importante del mundo. Eso no quiere decir, sin embargo, que las cuestiones deportivas, valga la redundancia, tengan que quedar de lado. Así, el mandatario merengue ha ido forjando poco a poco una estrategia de mercado para seguir siempre a la vanguardia en cuanto a éxitos se refiere. (La operación de 250 millones de euros que tiene en alerta a Florentino Pérez).
Juventud, divino tesoro
La política de fichajes del Real Madrid ha virado radicalmente de los fichajes galácticos, de campanillas, a los fichajes low cost. Primero, Florentino pensó que la mejor idea era apostar por el talento joven y confiar en los ojeadores que trabajan para el club. Con suerte, podría aparecer un Odegaard, un Vinicius o un Rodrygo para convertirse en un crack mundial. Están en camino, ellos y algún otro. Pero mientras tanto, hay que seguir ganando. (Martin Odegaard 'denuncia' la razón por la que Rodrygo Goes está desaprovechado en el Real Madrid Castilla).
De los fichajes jóvenes a los fichajes low cost
Por esta razón, Florentino Pérez ha dado una nueva vuelta de tuerca a su política de fichajes para el Real Madrid. Ahora, no solo va a por jóvenes sino que apuesta también por aprovechar las circunstancias favorables que puedan surgir a la hora de contratar a un jugador. Eso es precisamente lo que va a hacer con Christian Eriksen, al que se prevé que fichará por una cantidad que ronde los 25 millones de euros cuando hace unos meses le pedían el triple por él.
Lo único que ha cambiado es que Eriksen va a entrar en los últimos seis meses de contrato, momento en el que podrá negociar su salida del Tottenham sin dejar ni un euro en caja. Los Spurs tienen la necesidad de vender antes de que eso ocurra y aceptarían venderlo barato en enero antes de que se vaya gratis en junio.
Anteriormente, el Real Madrid fichó ya a Thibaut Courtois o Eden Hazard en circunstancias similares, cuando solo les quedaba un año de contrato y amenazaban con no renovar. Florentino apuesta de este modo por un método que ha ido muy bien a otros grandes clubes con recursos económicos inferiores, como es el caso de la Juventus de Turín, especializada en fichajes baratos e incluso a coste cero.