La Universitat Oberta de Catalunya (UOC) ha publicado recientemente que en España hay 6,7 millones de familias con perros. Este dato demuestra el gran protagonismo de las mascotas en la sociedad actual y cómo se han convertido en un miembro más de nuestras familias. Sin embargo, este sentimiento puede ser aprovechado por los estafadores en la llamada 'estafa del perrito'. Una nueva modalidad de robo en la que los delincuentes buscan en Internet propietarios desesperados por encontrar a su perro, dispuestos a pagar una gran cantidad de dinero para recuperarlo.
El modus operandi es bastante sencillo. Los delincuentes rastrean todas las redes sociales en busca de mensajes de dueños que piden la colaboración ciudadana para localizar a su mascota. Estas publicaciones suelen ir acompañadas de una imagen del animal detallada con las características identificativas y otros datos, por ejemplo, cómo se produjo la desaparición.
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Toda esta información es utilizada por los estafadores para confundir a las víctimas y vencer cualquier reticencia cuando contactan con ellas para decirles que han encontrado a su mascota o saben dónde puede estar.
Para ello, utilizan varias técnicas psicológicas que hace caer a la víctima en la trampa. Los estafadores la embaucan y ganan confianza porque le dicen lo que quieren escuchar. A su vez, los delincuentes buscan en internet una foto de un animal cualquiera y que se parezca a la mascota desaparecida, pero que esté algo alejada o borrosa. Otras veces envían una imagen con el animal sucio o herido para conmover.
Consiguen dinero gracias a la desesperación de los dueños de las mascotas
Ante la esperanza de haber encontrado a su perro, el propietario acepta pagar una cantidad de dinero por varios aspectos: recompensa por haberlo localizado, gastos veterinarios y de alimentación o el envío a través de una empresa de mensajería. Sin embargo, el animal nunca llega, y es cuando la persona se da cuenta de que han jugado con sus sentimientos y ha sido víctima de una estafa.
Detrás de este fraude se pueden encontrar, desde oportunistas sin escrúpulos, que encuentran a su siguiente objetivo gracias a un cartel de búsqueda colgado en la calle, hasta grupos organizados especializados en este tipo de estafas con las que hacen sufrir a las personas psicológicamente ante la pérdida de su animal de compañía.
El inspector responsable del Grupo II de Delitos Económicos de la Comisaría Provincial de Málaga apunta que los delincuentes que llevan a cabo la 'estafa del perrito' u otras con una esencia parecida, utilizan en su beneficio la carga emotiva que la envuelve. "Estamos tan deseosos de encontrar a nuestra mascota, que queremos creer que quien nos contacta es una buena persona y no dudamos en pagar", manifiesta. Sin embargo, aconseja que ante la más mínima duda, mejor no realizar ningún pago y ser precavido.
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Hay que tener mucho cuidado con este tipo de estafas ya que este tipo de personas no tienen esscrúpulos y son capaces de hacernos sufrir de una manera insospechada hasta que consigan lo que quieren.