La novia italiana de Pedro Sánchez: así fue su primer amor de verano

Esta confesión es la más impactante del presidente del Gobierno

16 de Abril de 2022
La novia italiana de Pedro Sánchez: así fue su primer amor de verano
La novia italiana de Pedro Sánchez: así fue su primer amor de verano

Una de las vidas más estudiadas de todo nuestro país es la del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Se conocen muchas cosas del hombre que lleva gobernando España desde que desalojó a Mariano Rajoy con una moción de censura en el año 2019. Su victoria en las elecciones generales de ese mismo año le otorgó un tiempo muy valioso para continuar aplicando sus medidas supuestamente progresistas.

Se saben muchos aspectos de la vida de Pedro Sánchez: iba para jugador de baloncesto, pero el mundo universitario y laboral le obligaron a renunciar de su sueño después de haber estudiado Ciencias Económicas y Empresariales. En su adolescencia tuvo su primer amor. En aquel primer encuentro con las flechas de Cupido, Pedro Sánchez tuvo la oportunidad de practicar su carisma a la hora de ligar, algo que el propio presidente ha confesado en más de una ocasión: "He sido ligón hasta los 31".

Esta juventud de ligue constante, rodeado de amigos que practicaban 'break-dance' provocó que Sánchez fuera en sus inicios "un poco bala". El primer amor del presidente sucedió hace ya mucho tiempo. "Mi primera novia era italiana. Tenía 14 años. Iba vestido como un breaker". Este romance de verano en las puertas de la adolescencia apenas duró más allá del mes de septiembre, pero sentó un precedente en la forma de ligar de Pedro Sánchez, que confiesa su técnica más celebrada: "Yo le daba mucho al palique".

De esta forma fue como se ganó el corazón de su primer amor, al que reconoce que jamás ha vuelto a ver. Después de aquel encuentro, Sánchez siguió su vida política y privada tal y como la conocemos hoy, aumentando su fama de ligón en diferentes ocasiones a lo largo de su ascenso a la secretaría general del PSOE por primera vez. 

Su caída en desgracia y su campaña por toda la nación provocó que la narrativa del Pedro Sánchez ligón y casual volviera a aflorar, a pesar de que ya estuviera casado por aquel entonces con su actual mujer, Begoña Gómez. Gómez ha sido un apoyo fundamental en la carrera política de Pedro Sánchez, quien solo tiene elogios para describir a su esposa: "Es positiva, constructiva, siempre mira las cosas buenas de la vida".

Con la misma técnica del "palique" que empleó con su famosa novia italiana, Sánchez logró conquistar a Begoña Gómez, de la que se enamoró "perdidamente". Con 16 años de matrimonio a sus espaldas, Pedro Sánchez solo tiene ojos para Begoña Gómez, uno de los pilares de su vida pública y privada que más le sostiene y acompaña cuando los que dicen estar a su lado le abandonan traicioneramente.