El padre de Irene Rosales, la mujer de Kiko Rivera y nuera de Isabel Pantoja, ha fallecido a las 6:00 de la mañana de este jueves tras muchos años luchando contra un tumor cerebral. Nueve meses después que la madre de Irene, la esposa de Kiko Rivera recibe un nuevo varapalo de la vida en medio de la guerra del DJ contra su madre, que tiene ahora una ocasión para acercar posturas.
Irene Rosales perdió hace nueve meses a su madre, y en este maldito 2020 ha visto cómo también abandona este mundo su padre. La noticia llega en un momento muy delicado para la familia Pantoja.
Y es que este mismo viernes Kiko Rivera planeaba sentarse nuevamente en el plató del Deluxe para la tercera parte del especial 'Cantora, la herencia envenenada'. Su presencia ahora, suponemos, tendrá que aplazarse para la semana que viene.
El padre de Irene Rosales ha padecido una larga enfermedad, desde el pasado año 2003 en el que le fue diagnosticado un tumor cerebral ha luchado para vivir pero esta dolencia ha terminado acabando con su vida.
Isabel Pantoja tiene una oportunidad
De este modo, Isabel Pantoja tiene una ocasión para acercar posturas con su hijo y con su nuera. Su actitud en este duro trance para el DJ y sobre todo para Irene Rosales puede ser decisiva en lo que suceda a partir de ahora.
La tonadillera tiene la opción de acudir personalmente al tanatorio, como ya hiciera cuando falleció su consuegra hace nueve meses, o directamente realizar una llamada para dar el pésame a su nuera. La otra posibilidad es que no haga absolutamente nada, lo que posiblemente aumentaría las rencillas familiares que están a punto de llevarla a juicio contra su hijo.
Isa Pantoja pide desesperadamente a su madre y a Kiko Rivera que se reconcilien antes de su boda
Cabe recordar que en los medios de comunicación se ha dicho que Isabel Pantoja se encuentra muy deprimida tras lo que ha sucedido con su hijo, que está en cama y medicada, por lo que parece complicado que salga de Cantora para absolutamente nada.
En cualquier caso, si hay un momento para solucionar las cosas probablemente sea éste, en el que la vida vuelve a dejarles claro qué es lo verdaderamente importante por encima de cualquier otra cosa.