Jorge Javier Vázquez ha reconocido que la serie documental de Rocío Carrasco causó un cisma interno en Sálvame, ya que cada colaborador tenía su propia opinión y pocas intenciones de escuchar al resto.
El presentador ha hablado en Lecturas sobre la muerte de su amiga Mila Ximénez y ha confesado que ésta ha ayudado a recomponer las piezas del puzzle del programa.
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"Mi amiga Mila ha conseguido algo impensable: que las aguas vuelvan a su cauce en ‘Sálvame’. Después de la fractura que supuso la docuserie de Rocío Carrasco pensé que el asunto tenía ya poca solución", ha admitido el de Badalona,
"Estábamos cada uno de nosotros poco dispuestos a escuchar al otro y eso enrareció el ambiente. La marcha de Mila ha logrado que volvamos a ser una piña y que lo de Rocío Carrasco parezca lejanísimo", ha explicado Jorge Javier Vázquez.
Rocío Carrasco desató una guerra en Sálvame
Queda claro que lo mismo que la serie de Rocío Carrasco ha provocado una gran división en la sociedad, ha sucedido también en Sálvame.
Los colaboradores habían visto cómo sus enfrentamientos por la docuserie hacían mella no solo en sus relaciones profesionales, sino también en sus propias relaciones de amistad.
De este modo, Jorge Javier ha expresado que la muerte de Mila Ximénez en cierta forma ha resultado beneficiosa en ese aspecto: todos han vuelto a unirse y a hacer frente común para superar la pérdida.
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Cabe recordar que colaboradores como Kiko Matamoros o María Patiño fueron muy vehementes en sus argumentaciones respecto a este tema, generándose tensión y conflictos que se han visto ahora disipados por la tragedia.