Cristina Rodríguez, más conocida como La Veneno murió el 9 de noviembre de 2016 de forma accidental, tal y como se dijo en un primer momento.
Sin embargo, la autopsia determinó que la famosa transexual, había fallecido de forma violenta.
La muerte de La Veneno
"De todo lo cual se deduce que se ejerció una violencia sobre el cuerpo de Cristina Ortiz Rodríguez, La Veneno, que le produjo la muerte, y que de ninguna manera fue accidental", es lo que determina el informe final de la autopsia realizado el 28 de octubre de 2018 realizado por el forense Luis Frontela Carreras, especialista en Medicina Legal y Forense de la Universidad de Sevilla.
Todo ocurrió el 6 de noviembre en su domicilio madrileño. El SUMA recibía una llamada alertando que Cristina se encontraba herida. Cuando los efectivos de emrgencias llegaron al domicilio encontraron a La Veneno en el baño envuelta en un charco de sangre.
Justo el día antes, ella misma había realizado hasta 4 llamadas a la policía asegurando que estaba siendo amenazada por su expareja. Sin embargo cuando los agentes se personaron en el domicilio, no quiso abrir la puerta asegurando que ella "no había llamado a nadie" y que "no quería a la policía allí".
Finalmente, falleció el día 9 en el Hospital La Paz después de no poder superar las lesiones ni el coma inducido.
El informa final de la autopsia
Ninguno de sus familiares creyó en la muerte accidental, y fue una de sus hermanas, María José, quien solicitó que se hiciese un informe forense de parte.
"El informe médico forense de autopsia (oficial, de fecha 16 de noviembre de 2016, informa de la existencia en la TAC craneal de hematomas subdurales (se mencionan en plural, sin indicar su número, localizaciones, tamaños ni características). El doctor afirma que "nos llama la atención que en la conclusión dos se indique "no existen lesiones ni de lucha y/o defensa en el cuerpo ni de otra índole en toda la economía del sujeto que puedan hacer pensar en una etiología violenta y/o criminal". Es decir, que la muerte en la versión oficial fue "accidenta"", reza el escrito del Dr. Fontela.
El periódico elcierredigital.com ofrece en exclusiva el dictamen de Luís Frontela. "esta afirmación es muy extraña teniendo en cuenta que a lo largo del informe médico forense no se mencionan lesiones que tenía la fallecida, que mostraban una acción de defensa de la víctima; por ejemplo se observan hematomas en el dorso de los dedos índice y corazón de la mano izquierda (figura 1)" y continua explicando que "estos hematomas no tienen aspecto de corresponder al apoyo de la mano en el suelo, a consecuencia de una caída, sino a que un objeto obtuso golpeó esos dedos cuando la víctima trato de defenderse interponiendo la mano, por ejemplo, entre su cabeza y el objeto causal de la violencia".
Además, habla de los hematomas de las manos los cuales no se mencionan en el ifnorme anterior. "Aunque ésta es una lesión que tiene un gran significado médicolegal ni se menciona por el médico forense, como tampoco la esquimosis que es evidente en el lado derecho del labio inferior, en la mejilla derecha y en las extremidades inferiores (figuras números 2 y 3)".
Finalmente, concluye con que la muerte no fue accidental sino que La Veneno murió de forma violenta y el escrito advierte que "se emite este informe con carácter de urgencia porque es perentorio solicitar que no se destruyan ninguna de las muestras tomadas del cadáver de Cristina Ortiz Rodríguez y que se nos faciliten toda clase de documentación, fotografías y muestras tomadas del cadáver, que aún se conserven, para poder realizar el informe definitivo, que sería efectuado conjuntamente con el profesor Dr. D. Carlos Perezagua Clamagirand".
Aunque este informe ha sido presentado al juzgado, también ha sido desestimado como prueba al igual que otras diligencias por causas desconocidas.