El caso de Julen conmovió a toda España. El pequeño de dos años se precipitaba el pasado 13 de enero de 2019 por un pozo en la finca de Totalán, de donde le rescataron, ya sin vida, 13 días más tarde.
El padre del niño, José Roselló, ha mantenido desde entonces ante los medios de comunicación y durante el juicio, que tanto él como su mujer desconocían la existencia de dicho pozo, acusando a David Serrano, amigo íntimo de la pareja y dueño de la finca, de homicio por imprudencia, y cortando todo contacto con él desde entonces.
La Fiscalía ya ha pedido tres años de prisión para Serrano, incidiendo en la afirmación de que el propietario "no había señalizado ni advertido" de la existencia del pozo.
El documento que lo desmiente todo
Sin embargo, recientemente ha salido a la luz (publicada por El Cierre Digital) una declaración de José Roselló realizada ante la Guardia Civil el día 14 de enero, un día después de la caída del niño. (Un caso en Valencia que huele muy mal: ¡¡Un bebé de 15 meses intoxicado por cocaína y cannabis!!)
En esa declaración, el padre del Julen afirmaba que "cuando llegaron a la parcela sabían que en el lugar estaba el pozo". "Me lo dijo David, pero estaba tapado por los dos cantillos", afirmaba Roselló ante la Benemérita.
En ese mismo documento, una vez sucedido el accidente y preguntado por lo que tapaba el agujero, el padre del menor afirmó que "junto a la boca del pozo había dos cantillos (bloques de hormigón) separados, y en el medio quedaba el agujero".
La solicitud de la defensa, denegada
El abogado de David Serrano, Antonio Flores Vila, solicitó a la jueza del caso celebrar un careo con Roselló, con la finalidad de esclarecer los cambios apreciables en los testimonios presentados ante la Guardia Civil y en la sede judicial.
Sin embargo, la jueza instructora, María Elena Sancho, ha rechazado esta petición, afirmando que esta nueva diligencia no era "pertinente ni necesaria".