Belén Esteban promocionó su negocio de alimentación en televisión con una visita a la fábrica de la empresa Cool Vega, donde se produce su gazpacho y salmorejo, en Alhama de Murcia. La colaboradora de Sálvame saboreó el producto in situ y dio su visto bueno, aunque al principio de su aventura empresarial nos vendió que la receta era casera y familiar... Una trola más.
Aunque cuando comenzó a promocionar su gazpacho en televisión Belén Esteban aseguró que su intención era que el mundo pudiera saborear la receta familiar del gazpacho, lo cierto es que tanto su gazpacho como su salmorejo no tienen nada de especial.
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La colaboradora de Sálvame se vanagloriaba de que todos pudieran disfrutar de los sabores de la familia Esteban Menéndez, pero en lugar de eso todos los que compran sus productos realmente están comprando un gazpacho normal y corriente. A unos les gusta más y a otros menos, pero no hay nada ni en sus ingredientes ni en la fórmula para hacerlo que varíe respecto a otros gazpachos.
Lo único que ha hecho Belén Esteban ha sido darle su nombre a un gazpacho convencional para aprovechar su imagen pública y hacer negocio. Lícito, pero que no nos venda la moto de que su gazpacho es diferente y especial.
El peor gazpacho para los consumidores
De hecho, en una encuesta de la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) en la que recientemente se analizaron hasta 41 gazpachos, el de Belén Esteban solo consiguió una pobre puntuación de 64 sobre 100, situándose en la parte media-baja de la clasificación. Pese a todo, en los meses que lleva trabajando con su empresa de alimentación ha conseguido buena acogida a nivel de ventas.
Belén Esteban está ilusionada y convencida de que va a conseguir sacar adelante su negocio, incluso a pesar del reciente varapalo que ha recibido con el veto de Mediaset a publicitarse en Sálvame de forma gratuita.
Sin embargo, lo que no es admisible es que nos venda la milonga de que su gazpacho es un producto familiar y que la receta es la misma con la que hacía el gazpacho su madre.
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La de Paracuellos lo dejó bien claro acudiendo a la fábrica donde se produce el producto y actuando como si no hubiera visto en su vida cómo se hace un gazpacho...