Miguel Ángel Oliver filtra las preguntas que le llegan a Pedro Sánchez, hecho que sitúa a España al nivel de algunas democracias débiles.
Y esta circunstancia ha enfadado a varios periodistas, que han arremetido contra el Ejecutivo.
La labor del periodismo
"En una situación de crisis el derecho a la información es más importante que nunca. Con España en estado de alarma, el Gobierno disfruta de unos poderes muy superiores a los normales, por lo que es importante que la prensa realice su labor de control, más aún cuando el Parlamento ha limitado enormemente su actividad. La principal forma de ejercer esta función desde el periodismo es a través de las preguntas -y las repreguntas- a los miembros del Gobierno", explican.
Y explican: "Sin embargo, la Secretaría de Estado de Comunicación ha organizado un sistema en el que todas las preguntas enviadas por los periodistas pasan necesariamente por el filtro del secretario de Estado, que es quien se está ocupando personalmente de formulárselas al presidente, a los ministros o a los técnicos. Es más, el propio secretario de Estado ha llegado a formular alguna pregunta al presidente del Gobierno, o incluso ha tratado de corregir públicamente a alguno de los técnicos".
Excusas y revancha
También explican que "las dificultades técnicas no son más que excusas. Otros actores políticos, nacionales e internacionales, realizan ruedas de prensa telemáticas en las que los periodistas habituales formulan las preguntas directamente a través de videollamada. De esta manera, tienen la posibilidad de preguntar directamente, lo que les permite formular la cuestión después de haber escuchado la comparecencia. Del mismo modo, tienen la posibilidad de repreguntar. Es así, y sólo así, como las personas que dan la rueda de prensa no pueden responder con evasivas, tal y como ha sucedido reiteradamente en las ruedas de prensa organizadas en el Palacio de La Moncloa".
El manifiesto
Periodistas progubernamentales como Jesús Maraña, Ana Pastor, Anabel Díez o Pepa Bueno han firmado el manifiesto y, según Libertad Digital, Oliver se vengó dejando fuera de las preguntas seleccionadas al día siguiente de su publicación a medios como la Agencia EFE, El País, El Diario o El Confidencial.