Carlos Herrera es, sin lugar a dudas, uno de los hombres de la radio más bien valorados de nuestro país. Como no, todo ese reconocimiento le ha llevado a ser la estrella de la Cadena COPE.
Herrera ha arrancado su tercera temporada con la cadena de los Obispos, después de estar unos catorce años vinculado a Onda Cero.
Su regreso con 'Herrera en COPE' ha supuesto un antes y un después para cadena en lo que a audiencias se refiere.
También los ingresos publicitarios crecieron de forma exponencial para el medio radiofónico, que anteriormente se encontraba prácticamente en bancarrota.
Cambios en el programa
Desde la vuelta de Herrera a las ondas en septiembre de 2015, tras su retirada temporal en marzo del mismo año, la cosas han cambiado. Después de anunciar su fichaje en julio, el locutor de radio vio como el equipo era prácticamente nuevo en relación a su anterior etapa.
En la presente temporada del programa de Herrera también hay una serie de cambios en relación a los horarios. En la primera temporada, el programa terminaba media hora antes que en la emisión de Atresmedia, para así poder despedirse de los oyentes por el medio día.
En la segunda, decidieron sumar una hora más de emisión para ganar audiencia, hecho que han seguido manteniendo esta tercera temporada. Esa hora de más, permitía a la COPE aprovechar el tirón que posee Carlos Herrera e ingresar una mayor suma de dinero.
La situación se ha agravado
Pero esta temporada la situación no es tan fructífera como la temporada anterior. Carlos Herrera ya no está presente ni al comienzo de esa franja, se despide de la audiencia antes del boletín del mediodía y ni siquiera Navarro y Naranjo lo hacen. La COPE ha puesto al frente a un hombre ajeno al programa: Jon Uriarte.
Este cambio no ha sentado nada bien a los anunciantes y clientes repartidos por toda la geografía española, ya que no quieren que se les aplique la 'tarifa Herrera'. Esa marcha de una hora de Carlos Herrera le puede costar muy cara a la emisora episcopal.