La etapa más dura de la historia del Tour

El Tour de Francia siempre ha sido la mejor demostración de que el ciclismo es uno de los deportes más duros y exigentes del mundo

03 de Febrero de 2023
La etapa más dura de la historia del Tour
La etapa más dura de la historia del Tour

Sin embargo, con la profesionalización vivida en los últimos años y el avance de la tecnología se han podido ir suavizando algunas de las condiciones más inhumanas de esta actividad deportiva. Actualmente se tiende a sacrificar la longitud de las etapas en favor de recorridos más duros y escarpados, algo que no sucedía en los primeros años de la ronda gala.

La jornada más larga de la historia del Tour, 482 kilómetros entre Les Sables d’Olonne y Bayona, que se completaron en 19 horas y 44 segundos por su ganador, el ciclista Firmin Lambot. Se repitió seis veces de 1919 a 1924. Por aquel entonces los corredores podían parar para hacer descansos y avituallarse. Además, en ese año el recorrido constó de 15 etapas y un total de 5,503 kilómetros; si bien la edición de 1926 le superó con 5.795 kilómetros.

Firmin Lambot era un belga previsor. En 1919 había ganado el Tour, pero aprendió la lección que sufrieron sus rivales. El líder era Eugéne Christophe, que vestía el primer maillot amarillo de la historia, algo que no le gustaba demasiado: "se burlan de mí, me llaman canario". Pero en la penúltima etapa le ocurrió una desgracia que ya le había sucedido en 1913. Rompió la horquilla de su bicicleta, tuvo que parar a repararla y perdió el Tour.

Lambot no quería que le ocurriese algo así, por lo que salía a las carreras con el dinero suficiente encima como para comprarse una bicicleta si se le rompía la suya...