El ahora ex diputado de Unidas Podemos, Alberto Rodríguez, era condenado en firme por el Tribunal Supremo por propinar una dura patada a un policía durante una manifestación en 2014; una condena que imponía una pena económica y, además, un mes y medio de inhabilitación para ejercer el sufragio pasivo.
Una condena ante la que toda la formación morada se revolvía en los medios de comunicación, redes sociales, y en el Congreso de los Diputados, donde exigían a Meritxell Batet que defendiera al diputado canario, aunque, finalmente, la socialista decidía obedecer al escrito del alto tribunal, retirando el escaño a Rodríguez en el Parlamento.
Situación ante la que el podemita canario decidía abandonar la política y a la formación, optando por 'regresar' a su empleo anterior como obrero industrial.
Una actitud que ha sido muy aplaudida dentro de la formación morada que, a pesar de mantener una defensa férrea de la inocencia del canario, han querido sacar pecho de la situación, asegurando que la decisión de Rodríguez está llena de "dignidad", la cual no comparte con otros ex políticos, que han acabado en la cúpula de "Iberdrola ni Gas Natural".
Rodríguez quiere volver a la política
Sin embargo, esa "dignidad" de la que presumía Jaume Asens al hablar de Alberto Rodríguez parece haber durado bien poco en la vida del ex diputado canario.
Así pues, apenas 24 horas después de que Asens aplaudiera la decisión de Rodríguez de abandonar la política, pero no su "dignidad", se ha podido conocer que el ex diputado se ha dirigido a la Junta Electoral Central, pidiendo explicaciones sobre cuándo habrá finalizado su condena de mes y medio de inhabilitación.
En concreto, la defensa del exparlamentario habría pedido al organismo "que emita una certificación sore las fechas de cumplimiento de la pena, según tenga calculado esta Junta Electoral Central", basándose en la inhabilitación para ejercer el sufragio pasivo de 45 días estipulada por el Tribunal Supremo.
Del mismo modo, los abogados de Rodríguez han revelado la existencia de un informe de la Fiscalía del alto tribunal en el que se expone que la condena de inhabilitación "implica única y exclusivamente que durante el tiempo de un mes y quince días que se fije en tal liquidación, el señor Rodríguez no podrá presentarse a cargos públicos. Ni más ni menos".
Peticiones de la defensa del ex diputado morado que podrían implicar que, lejos de mantenerse en la "dignidad" como obrero industrial, el canario podría estar buscando ya la manera para, tras cumplir su condena de inhabilitación, regresar a la formación morada, asi como a su escaño en el Congreso, aún vacío.