Siempre hemos soñado con averiguar qué sucede detrás de los muros de lugares como el Palacio de la Zarzuela o La Moncloa, curiosos de comprobar cuál es la vida diaria de las altas personalidades políticas y sociales de nuestro país. Sin embargo, cada tanto podemos conocer los entresijos de los dos lugares más importantes de nuestro país gracias a personas que están dispuestas a revelar parte de sus secretos.
Gracias a los testimonios del chef José Roca, el cocinero principal de La Moncloa, podemos conocer más de cerca los hábitos alimenticios de todos los presidentes de la historia de la democracia moderna de nuestro país desde Adolfo Suárez hasta el presidente que todavía se aferra al cargo como puede, cosciente de que su mandato está llegando a su fin por fortuna para los españoles: Pedro Sánchez.
Según el propio Roca, "todos los presidentes españoles han disfrutado de la gastronomía. Excepto Suárez, que no era mucho de comer, porque pasaba momentos difíciles. Pero todos han comido muy bien". No es para menos: la experiencia de Roca como chef ha sido avalada por nombres tanto dentro como fuera de nuestro país, y no se trata precisamente de políticos de segunda o tercera categoría. Entre algunos de los invitados que Roca ha dado de comer se encuentran varios presidentes de Estados Unidos y una larga lista de dignatarios y diplomáticos extranjeros que han visitado nuestro país a lo largo de estos aproximadamente cuarenta años de democracia moderna.
El actual presidente del Gobierno es un apasionado de los platos "de toda la vida" según las palabras de José Roca: "No te puedo contar mucho, pero a la mayoría de ellos les gustaba o les gusta la comida tradicional española, que siempre triunfa. Es la riqueza que tenemos aquí... Aunque, a veces, también ponemos cosas que no son nuestras y triunfamos". Esta es una de las pocas señales que demuestran que Sánchez apenas tiene amor por el país que supuestamente gobierna. Así, esta actitud explica muchos de sus comportamientos durante su legislatura: mientras decía luchar por los españoles, en realidad estaba favoreciendo a los suyos y perjudicando a los ciudadanos de a pie, que a día de hoy se ven envueltos en una dura crisis que recién comienza para la mayoría de la población.
Además, José Roca señala que Sánchez siempre está abierto a las licencias que el chef y su equipo se toman alguna que otra semana. Solo faltaría eso, quejarse de que sirven comida de una calidad excelente y preparada al gusto. El propio José Roca indica que "a veces, hacemos días especiales. Por ejemplo, un día americano [con perritos calientes y patatas fritas incluidas]. Pero, por lo general, se intenta hacer una dieta balanceada. Siempre intentamos hacer la comida más sana posible", tomando en cuenta algunos de los platos favoritos del presidente al cargo, como las pizzas "cojonudas" de las que Pedro Sánchez es un entusiasta.
Durante sus largos años de faena en las cocinas de La Moncloa, José Roca apenas ha tenido quejas o malos momentos con cualquiera de los presidentes que han asumido el cargo desde que el propio Adolfo Suárez reiniciara la línea de presidentes de España: "Siempre intentamos ir a lo seguro, pero sí que ha pasado que, alguna vez, he hecho alguna cosa y cuando he subido a hablar, me han dicho 'esto no lo pongas más'. Pero no es tan complicado, ni con las visitas". Las experiencias del cocinero del presidente siempre son bienvenidas, especialmente cuando sirven para conocer a nuestros gobernantes presentes y pasados más de cerca.