El confinamiento provocado por la crisis sanitaria del coronavirus propició el aumento de las compras en los supermercados ante el miedo de la falta de abastecimiento.
Era habitual ver las imágenes de los supermercados hasta arriba de gente y con interminables colas para poder entrar.
En el tiempo que pasamos en casa la repostería fue una de las actividades más recurrentes, y por ello la compra de levadura aumentó en un 200%. Por no hablar de la locura que agotó el papel higiénico.
Nuevas tendencias
Durante la desescalada a algunos se han pasado con las compras y han gastado de más unos 500 euros de media, según el Observatorio Cetelem.
El 73% de los españoles ha cambiado su manera habitual de consumo durante la crisis.
El 46% elige la tienda del barrio para hacer las compras por solidaridad hacia el pequeño comercio que ha sido muy castigado en esta crisis.
En la nueva normalidad destaca la tecnología, los viajes y la belleza.
Además, la compra por internet es un recurso muy útil en estos tiempos y parece que muchos ya no quieren la tienda física.