Lorenzo Milá no pasa por sus mejores momentos.
Y seguramente este hecho tenga una parte injusta porque él simplemente se encargó de repetir en televisión lo que le decían los médicos italianos.
Pero el corresponsal de TVE en el país transalpino se hizo viral, en el sentido digital del término, con un monólogo en el que rebajaba la importancia del coronavirus.
El 25 de febrero el periodista relativizaba el asunto: "Al final aquí los médicos no se cansan de repetirnos que estamos ante un tipo de gripe. Es un tipo de gripe nueva, es verdad. No tenemos memoria vírica, no tenemos de momento vacuna, pero al final es un tipo de gripe que, como la gripe, afecta sobre todo a personas con defensas bajas con situaciones de salud precarias como las personas mayores, que es lo mismo que ocurre con la gripe común. Y tiene un índice de mortalidad bajísimo, más bajo que la gripe común, en torno al 2%".
"Por tanto, no podemos hablar de virus terroríficos como pueda ser el ébola, no. Estamos hablando de un tipo de gripe del que se curan la gran mayoría de las personas que se han infectado, como estáis diciendo", añadió.
Mercedes le creyó
Lorenzo seguía: "Como digo, la mayor parte de estos infectados se están recuperando en su casa, como si fuera una gripe común, menos de la mitad están hospitalizados y apenas 25 personas en la UCI".
"Esta es la fotografía médica real que aquí los médicos no se cansan de repetir, pero, chico, parece que se extiende más el alarmismo que los datos, ¿no?", añadía.
Atrapada
Mercedes le creyó... y se quedó atrapada en Italia, que cerró fronteras.
La presentadora fue a grabar un capítulo de su programa 'Scott y Milá', y vivió una odisea.