Yolanda Díaz siempre está un paso por delante a sus compañeros de Unidas Podemos en la carrera por llegar a la presidencia del Gobierno. Con la creación de SUMAR, la comunista se desvincula completamente de Belarra, Montero y compañía para luchar en solitario por un objetivo que parece creer tener bien atado, puesto que su relación con el actual mandatario español es más que buena.
En los últimos días del Debate del Estado de la Nación, se ha podido ver a Pedro Sánchez y Yolanda Díaz más unidos que nunca, con una cercanía inusitada y una familiaridad que hace sospechar y saltar las alarmas de muchos usuarios de redes sociales cuando han visto el último corte de la retransmisión de una de las sesiones del Congreso de los Diputados.
Esta cercanía no es casual: Sánchez sabe que necesita del apoyo de sus socios comunistas e independentistas para intentar acabar su legislatura, una de las más nefastas en la corta historia de la democracia moderna de nuestro país. Sin embargo, todos se han hecho una pregunta al ser testigos de la distendida conversación entre Yolanda Díaz y Sánchez: ¿de qué estaban hablando con tanta naturalidad y confianza?
Ninguno se ha pronunciado respecto del contenido de la conversación, que ha sido un tema de debate recurrente en las redes sociales durante casi dos días. Además, muchos usuarios también tienen en cuenta diferentes gestos que Yolanda Díaz ha tenido durante el desarrollo del Debate: no aplaudió a Pedro Sánchez durante algunas de sus intervenciones durante los turnos de réplica del Ejecutivo, lo que hace pensar en una suerte de desavenencia entre los socios de Gobierno.
Sin embargo, esta actitud tan distendida y risueña que muestran ambos parece indicar todo lo contrario. La propia Yolanda Díaz ha tenido que salir a pronunciarse, y no ha sido precisamente para aclarar una situación que tiene navegando entre las aguas de la confusión a los españoles. Citada en redes sociales, la líder comunista de SUMAR ha respondido con una simple imagen en la que una mujer 'cierra la cremallera' de su boca, dando a entender que no piensa revelar el contenido de la conversación que ha mantenido con Pedro Sánchez, que se mantendrá oculto por siempre hasta que alguno de los dos interlocutores decidan revelarlo.
La complicidad entre Yolanda Díaz y Pedro Sánchez ha ido aumentando con los meses, especialmente después del anuncio del proyecto de redacción de una nueva ley laboral, que parece que unió al presidente y a su ministra de Trabajo más allá de los límites estrictamente profesionales. Sin embargo, la ex de Unidas Podemos también se hace la difícil: a pesar de que charla distendidamente y entre carcajadas con Pedro Sánchez, no tiene problemas en abandonarle y dejarle solo cuando necesita el apoyo de sus socios y no mostrarle ningún reconocimiento, cuando el presidente del Gobierno fue uno de los únicos que citó a Unidas Podemos como un aliado sin el que no se hubieran podido conseguir todas las "conquistas sociales" que su Ejecutivo, supuestamente, ha realizado durante esta legislatura.
No obstante, la conversación, que dura apenas quince segundos, sigue dando mucho que hablar. Yolanda Díaz ha salido de entre las sombras para negarle el derecho de información a los españoles, que siguen en la oscuridad más absoluta respecto de los tejemanejes de sus líderes gubernamentales, comunistas e independentistas, a los que se les acaba el tiempo para intentar destruir España. Y parece que han realizado avances más que significativos.