La Asociación Pro Guardia Civil acusa a la consejera de Sanidad de un delito de 'odio', al excluir a los agentes de la vacunación frente a los Mossos d'Esquadra y la policía local catalana.
Después de meses inoculando la vacuna, Cataluña aún no ha comenzado a vacunar a los agentes de la Guardia Civil destinados en la autonomía, a pesar de la importancia de estos agentes en el día a día de la autonomía, y de su estrecho contacto con la ciudadanía.
Una situación que no sólo ha provocado el descontento entre los de la Benemérita, sino que también ha provocado una clara desigualdad entre estos agentes y los miembros de los cuerpos de seguridad autonómicos, como son los Mossos d'Esquadra o la policía local de las diferentes ciudades catalanas, ya vacunados o en proceso.
Un desequilibrio que ahora llegará a los tribunales, después de que la Asociación Pro Guardia Civil (Aprogc) haya denunciado a la consejera de Sanidad de la Generalitat, Alba Vergés, por haber incurrido en un presunto delito de odio contra el cuerpo.
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Y es que la asociación ha considerado que Vergés podría haber excluido voluntariamente a los de la Benemérita del plan de vacunación, a pesar de que la actualización 3 de la Estrategia de Vacunación Covid-19 en España "contempla como grupo de població a vacunar a los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, por su función esencial para la sociedad y por la dificultad de sustituirlos, estando establecido que la gestión de la vacunación recae en las diferentes comunidades autónomas".
Un delito de odio debido a la condición "estatal" de la Benemérita
Según el Código Penal, un delito de odio es "cualquier infracción penal, incluyendo infracciones contra las personas o las propiedades donde la víctima, el local o el objetivo de la infracción se elija por su real o percibida, conexión, simpatía, afiliación, apoyo o pertenencia a un grupo".
Un delito que habría cometido la consejera de Sanidad, que habría "excluido del proceso de vacunación a la Guardia Civil", "jugando con los derechos de los guardias civiles, asi como de sus familias, en este preciso momento de emergencia sanitaria".
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Y es que, según la asociación, esta "exclusión" de la Benemérita en la vacunación, que no se ha repetido en los demás cuerpos de seguridad presentes en Cataluña, se habría debido a que la Guardia Civil es un cuerpo de seguridad del Estado español, en contraposición a la condición autonómica de los Mossos o la policía local.
"La exclusión [...] se está produciendo tan sólo por el hecho de serlo, como así se demuestra con los datos ofecidos, donde por parte de ese organismo de la administración autonómica, se ha vacunado al personal de las policías locales y autonómicas, pero no al personal de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, poniendo en riesgo, no solo a las familias de este colectivo, sino también a la ciudadanía en general".