Jorge Javier ha encontrado el momento perfecto para desahogarse y contar cómo ha vivido su homosexualidad en casa.
Salir del armario cuando él era joven no fue tarea fácil y menos cuando tienes un padre tan estricto como el suyo.
Con su padre tuvo una relación muy especial aunque falleció de un cáncer a los 59 años de edad. (Jorge Javier Vázquez le dedica estas palabras a la "barriobajera" Terelu Campos y al 'coño de su prima')
Jorge tenía todo lo que su padre no quería. De hecho él "siempre" tuvo la sensación de que "le defraudaba".
Tan duro había llegado a ser su padre que una vez le dijo que "prefería tener un hijo muerto a un hijo maricón pero también te haces a eso. Pero yo estoy encantado de ser gay porque te hace más fuerte emocionalmente".
"Me hubiese gustado que mi padre viera que no me ha ido tan mal en la vida", reflexiona el popular presentador.
La relación entre padre e hijo
El catalán cree que a día de hoy su padre no hubiese llevado nada bien su fama. "Siempre pienso que para él hubiera sido muy complicado gestionar lo mío con la popularidad y la clase de programas que hago tan polémicos, porque él era lo contrario a mí, absolutamente. Súper callado, un hombre bastante cristo...".
Además, se ha sincerado y ha contado cómo su padre se enteró de que era gay. Siempre evitó tratar este tema con él puesto que era consciente de que no le hacía ninguna gracia el asunto.
"Yo me enteré que mi padre lo sabía en una entrevista en la que estaba mi madre. ¿Te lo puedes creer? Estábamos en el programa 'El convidat' de Albert Om en TV3 y Albert me preguntó: '¿Entonces tu padre no lo sabía? Y salta con toda la tranquilidad mi madre: "ah, no, mi marido lo sabía...", empieza explicando.
"Yo le dije: '¿Cómo que lo sabía?", le preguntó a su madre.
"Desde ahí hubo una época en la que dejó de preguntarme por si me casaba o si iba a tener hijos...", cuenta. (Jorge Javier Vázquez se desnuda en su 50 cumpleaños y cuenta lo más escabroso de su vida)
Ahora, Jorge echa de menos estar con su padre y pasar tiempo con él además de señalar que le gustaría haber podido disfrutar con él de todo lo conseguido.