La brutal campaña de The New York Times contra Felipe VI

El periódico estadounidense sigue publicando artículos perjudiciales para la monarquía española

La brutal campaña de The New York Times contra Felipe VI
La brutal campaña de The New York Times contra Felipe VI

The New York Times se ha hecho eco del referéndum sobre monarquía o república celebrado hace unos días en la localidad balear de Valldemossa, en el que se impuso la opción republicana con un 78% de los votos. (La cobardía de Pedro Sánchez: rechaza un cara a cara con Pablo Casado)

El partido que impulsó la consulta, la Valldemossa que Volem, afirma que "la monarquía sólo ha sido buena para Mallorca en la medida en que algunos de nuestros políticos y empresarios probablemente se enriquecieron a cambio de lujosos favores que le habían hecho a la familia real". 

El NYT afirma que "es difícil medir el nivel actual de apoyo para la familia real, particularmente desde que el Centro de Investigaciones Sociológicas, controlado por el Estado, eliminase una pregunta sobre la monarquía de sus encuestas sobre la opinión pública en 2015". 

El periodista Raphael Minder afirma que "bajo la presión de políticos de izquierda, se espera que el CIS incluya pronto la cuestión real en sus encuestas (...) Algunos votantes en Valldemossa dijeron que querían abolir la monarquía porque se trata de una institución obsoleta, pero que no deseaban que Mallorca se independizase de España". 

No es la primera vez

The New York Times ya publicó hace unos meses un polémico artículo firmado por su corresponsal David Jiménez, ahora de moda por un libro que acaba de publicar. Jiménez afirmaba que "la monarquía española necesita un referéndum" porque "ni las tradiciones monárquicas ni la atención educativa que reciben los herederos garantizan que el cargo pase siempre a una persona con suficiente capacidad intelectual o moral. Lo contrario es más probable: que el trono sea ocupado, tarde o temprano, por alguien incompetente o corrupto". 

Algunos sectores reaccionarios, según Jiménez, "ven las consultas como un ataque al corazón del Estado español. En realidad, harían bien en aceptar el envite: la monarquía necesita un referéndum para garantizar su continuidad a largo plazo y renovar su legitimidad democrática". 

Juan Carlos I, según Jiménez, era "para muchos fue un adelantado a su época por la forma en la que comprendió que la monarquía sólo tenía sentido si demostraba su utilidad a la ciudadanía. Hay allí una enseñanza para Felipe VI. Los reyes modernos, además, deben estar dispuestos a medir esa legitimidad en las urnas".