Los golpistas catalanes quieren apropiarse hasta de la Navidad. Los lazos amarillos en defensa de los líderes independentistas encarcelados por intentar dar un golpe de Estado contra España el 1-O han llegado hasta las luces navideñas que adornarán Barcelona en las próximas fiestas. El ayuntamiento de Ada Colau ha permitido la instalación de lazos amarillos entre el alumbrado navideño. ¡¡No se puede ser más boba!!
Se siguen traspasando todos los límites de la indecencia en Cataluña. La celebración de una fiesta tan entrañable como es la Navidad también pretenden politizarla con la instalación de unos bochornosos lazos amarillos en el alumbrado decorativo especial que dará luz a la ciudad de Barcelona durante las próximas semanas. Es una vergüenza, ¿cómo se puede consentir semejante mamarrachada?
Ciutat Vella ya muestra el alumbrado navideño golpista
Esta decoración con tintes políticos ya se puede ver en el distrito de Ciutat Vella, donde han empezado a colocar ya las luces de Navidad. Ada Colau no solo rehúsa de símbolos religiosos, sino que además ha convertido una fecha tan señalada en una nueva arma arrojadiza contra la democracia. Más propaganda separatista en una fecha que ni siquiera felicitó el año pasado a la ciudadanía.
Este nuevo detalle refleja que a Ada Colau le da exactamente igual la Navidad, solo quiere echar un cable a sus amigos golpistas con una nueva ignominia. Lo curioso del caso es que la misma alcaldesa que no felicitó la Navidad a nadie hace poco menos de un año sí decidió felicitar el Ramadán a la comunidad musulmana. ¿Por qué a unos sí y a otros no?
El presidente del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández, ha puesto el grito en el cielo por semejante mamarrachada y ha exigido a Colau que “no permita politizar la Navidad y se respete la neutralidad en las calles”. Del mismo modo, ha recordado que el PP ha denunciado en varias ocasiones esta falta de neutralidad, pasándose por el forro la opinión de los no nacionalistas.
Ada Colau, una indepe disfrazada
Ada Colau no se ha posicionado abiertamente en favor de la independencia de Cataluña, pero sí ha mostrado siempre un apoyo implícito en su forma de proceder. El asunto de los lazos amarillos en las luces navideñas es la gota que colma el vaso. Todo con tal de intentar arañar algún que otro voto independentista y no salir escopetada del Ayuntamiento barcelonés en las próximas municipales con el choque que se prevé entre Manuel Valls y las fuerzas separatistas que la deja como tercera en discordia.