La victoria del Fútbol Club Barcelona en Pamplona frente al Osasuna (1-2) hace que el Real Madrid deba ganar sí o sí ante el Cádiz el próximo jueves en el Santiago Bernabéu, para seguir manteniendo la distancia de dos puntos respecto a los culés. Los futbolistas son conscientes que son los máximos culpables de haber perdido el liderato justo antes del parón por el Mundial, después del empate ante el Girona y la derrota contra el Rayo Vallecano.
Y es que los madridistas llevaban varios partidos no mostrando buenas sensaciones, excepto en el último de Liga de Campeones frente al Celtic. Se nota que se acerca el Mundial de Qatar y que muchos futbolistas están más pendientes de esto que de su propio club. Desde el cuerpo técnico del Real Madrid saben que con la Copa del mundo de por medio muchos futbolistas se han descentrado y ha hecho que el equipo haya dado un tremendo bajón físico y mental en estas dos últimas semanas, que les ha hecho perder el liderato.
Enfrente estará un equipo que se juega un año más la permanencia en Primera División. Los gaditanos se encuentran penúltimos en la clasificación, empatados a once puntos con el Sevilla y el Celta. Carlo Ancelotti le dio un toque de atención a su plantilla tras el pinchazo en Vallecas y aseguró que hay que ganarles como sea para irse al Mundial muy cerca en la clasificación del Barcelona.
Carlo Ancelotti podría hacer varios cambios en la alineación con respecto a la que sacó contra el Rayo Vallecano. Es casi seguro que Toni Kroos volverá al once después de haberse perdido el choque de Vallecas, debido a la expulsión que sufrió en el anterior encuentro frente al Girona en el Santiago Bernabéu. Otro que podría jugar sería Nacho, que ha pasado a ser el cuarto central del equipo tras la llegada de Rüdiger, pero que siempre rinde a un gran nivel cuando le toca jugar.
Uno de los que estará con casi total seguridad sobre el terreno de juego será Álex Fernández, el hermano pequeño de Nacho y que es un indiscutible en el centro del campo del Cádiz. Al igual que el 6 blanco, el de Alcalá de Henares pasó por todas las categorías inferiores del Real Madrid, y llegó a debutar en partido oficial con el primer equipo en un partido de la Copa del Rey 2012/2013, en el que también jugó su hermano y el entrenador por aquel entonces era José Mourinho.
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