Belén Esteban ha sido la responsable de que a María Patiño se le vea el plumero una vez más. La colaboradora de Sálvame y su compañera mantienen una relación en la actualidad que durante muchos años fue completamente diferente. Ahora son grandes amigas, pero en el pasado fueron enemigas acérrimas, se tiraron los trastos a la cabeza en los platós de televisión y se dijeron barbaridades mutuamente. Luego ambas se reunieron en Sálvame y todo lo anterior quedó borrado.
Que no hablen del pasado no significa que no exista, y del mismo modo que María Patiño ha cambiado su forma de ver las cosas con Belén Esteban, de la que dijo muchísimas cosas negativas en su momento, ahora lo ha hecho con Rocío Carrasco y Antonio David. Pero no vayan a creerse que ha sido una cuestión de cambio de opinión sin más. La periodista se arrima al sol que más calienta y en función de los intereses que tenga se pone a favor de un personaje u otro.
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Durante su etapa en 'Dónde estás corazón', a María Patiño le interesaba atizar a Belén Esteban. Lo hizo hasta la saciedad porque formaba parte del guión que debía seguir. Y ahora hace lo mismo con Rocío Carrasco. Al inicio de la docuserie tenía una forma de ver las cosas que ha ido cambiando porque el guión así lo exige: 'La Fábrica de la Tele' no puede consentir voces discordantes y ha sumado a Patiño a su causa a pesar de que no piensa muchas de las cosas que dice.
A la vista están sus contradicciones, a la vista están los comentarios con los que, sin darse cuenta, deja por los suelos a la gente a la que pretende defender, etc. Es más torpe de lo que cree y ya le han visto el plumero.
De la guerra a la amistad con Belén Esteban
Su 'modus operandi' está claro: si con Belén Esteban le interesaba llevarse bien cuando fichó por Sálvame, con Rocío Carrasco también le interesa llevarse bien. Aunque en ambos casos inicialmente tuviera una opinión contraria a ambas, motivos de peso han hecho que cambie su postura. No podía entrar en guerra con dos personajes tan poderosos dentro de Telecinco.
Ya no es solo un cambio de opinión, tanto con Belén como con Rocío ha pasado de la crítica feroz al peloteo continuado. Las imágenes de sus enfrentamientos con Belén Esteban en el pasado son de 'tierra trágame' para María Patiño.
Sin embargo, la periodista ni se inmuta y sigue defendiendo que ella es dueña de una verdad absoluta que cambia según sople el viento. En Sálvame se atrevían a llamar veleta a Rosa Benito hace unas semanas, pero no hay nadie más veleta que la presentadora de Socialité. El siguiente vídeo es una prueba más de que Patiño dice una cosa hoy y otra mañana y se queda tan ancha.
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Hace unos años, llamaba "amargada" a Belén Esteban delante de toda España y le decía que iba vendiendo penas en los medios de comunicación por su hija con Jesulín. Ahora le parece perfecto que Belén haya vivido más de 20 años a costa del torero. Hipocresía, cinismo y doble rasero que ha repetido con el caso de Antonio David y Rocío Carrasco.