Anoche fue uno de esos capítulos de ‘Cuéntame cómo pasó’ que se quedan en la retina de los espectadores. Era el día de la boda entre Carlos y Karina, aunque no todo iba a salir según lo previsto, pues Merche decidió detener el enlace asegurándole a su hijo que no podía casarse sin su padre. Aunque la respuesta del novio fue clara: "Claro que puedo, mamá. Si mi padre no ha querido venir a nuestra boda es su problema".
El serial empezó con una discusión entre Antonio y Carlos, cuando éste último asistía a una entrevista de trabajo la misma mañana de bodas. . "¿Dónde estabas cuando el incendio?", le preguntó. "Puedo entender que tú, mi padre, en un momento dado hayas hecho una locura. Solo te pido que me la expliques, que me la cuentes, con confianza". La reacción de su padre fue clara: "Bájate del coche, ¡que te bajes del puto coche!".
Tras este encontronazo entre padre e hijo, Carlos llegó tarde a la entrevista y a su propia boda, lo que hizo que Karina, su prometida, empezase a preocuparse mientras le esperaba. Herminia, por su parte, metía leña al fuego: “Yo creo que Carlos se lo ha pensado dos veces”.
Carlos apareció cinco minutos más tarde de lo previsto y sin su padre, lo que provocó una acalorada discusión con sus hermanos cuando Merche decidió paralizar el enlace, sin entender cómo su hijo había podido desconfiar de esa forma de su propio padre. “Es tu problema. Yo habría hecho lo mismo. Me duele en el alma lo que has hecho", le recriminó su hermana Inés. Toni intentó calmar la situación, pero salió también escaldado. "Habló el equidistante, que no te callas ni debajo del agua".
Carlos estalló y quiso dar por finiquitado el asunto. “: ¡Ya está bien, es mi vida y es mi boda! ¿Vale? Inés, déjalo ya, que cuando te pones como actriz intensa eres insoportable".
Entonces Herminia se levantó de su silla y entre gritos puso todo en su sitio: “¡A callarse todo el mundo! ¿Será posible que ninguno de mis nietos se pueda casar de una manera normal? Me tenéis hasta la coronilla, ¡eh! He venido a esta boda con estos zapatos que me aprietan una barbaridad, me he comprado este chal elegante que me ha costado un ojo de la cara y he venido a una boda que no parece una boda", lamentó la abuela. "¡¿Queréis casaros de una puñetera vez y acabar con este suplicio?! Y si Antonio no está que hubiese venido. Si os queréis matar... os matáis, pero cuando yo no esté delante. Señor juez, ni caso. ¡A lo suyo!".
Por suerte, un final feliz
Sin embargo no todo iba a quedar ahí. Carlos tuvo que abandonar a Karina en el juzgado para ir a la entrevista de trabajo y conseguir el empleo. “Me han dicho que va a ser solo un momento. Nos estamos jugando nuestro futuro. A las 2 de la tarde estaré en el banquete. Te amo, te quiero”. Pero fueron pasando las horas y Carlos no aparecía. Mientras la fiesta seguía en el bar del barrio, Karina se iba desolando.
Pero el recién casado volvió, aunque no tuvo el recibimiento esperado. Karina le abofeteó y le dijo entre lágrimas: “Gracias por la peor boda del mundo”. Carlos, perplejo, le confesó que había conseguido el trabajo, “Me pagan 10 veces más que de mensajero, pero si te parece mal puedes darme en la otra mejilla”. En ese momento, se fundieron en un beso para alegría de los invitados.
El capítulo finalizó con el verdadero culpable del incendio que había provocado el distanciamiento entre Carlos y su padre. Don Froilán, el cura, fue el autor del destrozo a la bodega cuando tiró un cigarrillo encendido para no ser descubierto. Y en las últimas imágenes, se pudo ver de nuevo a padre e hijo confesándose algo al oído, dejando la duda de si habrá perdón o no.
Pese a la importancia del capítulo, la serie sufrió un ligero bajón de audiencia, pasando del 15,4% de share de la pasada semana al 15% justo de ésta. Aunque en número total de espectadores sí que salió ligeramente ganando con 2.227.000. Con todo ello, la longeva serie sigue aguantando las embestidas de ‘GH VIP 6’, que anoche registró su mejor marca hasta la fecha con un 31,1% y 3.202.000 de espectadores.