Después de estar tres días ingresado en el Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla, Kiko Rivera ha sido dado de alta el pasado lunes. Su mujer, Irene Rosales, fue la encargada de recoger al DJ.
Sin embargo, por el momento, ni su madre, Isabel Pantoja, ni su hermana, Isa Pi, han podido visitar a Kiko, algo que tiene preocupadas a las dos porque tampoco nadie les cuenta cómo se encuentra el artista.
"Mi madre quiere ver a Kiko, pero lo que le han transmitido es que las visitas nuestras le pueden alterar y es mejor no alterarle porque está hospitalizado, y es mejor esperar a que él salga del hospital y quiera hablar con nosotras", explicaba Chabelita confensando la delicada situación en la que se encuentra Isabel Pantoja porque, a pesar de querer verle y abrazarle, no quiere alterar a su hijo y que empeore.
La hermana de Kiko Rivera también confesó lo siguiente: "Yo sí querría ver a mi familia independientemente de lo que haya pasado. Yo no voy a alterarle ni tampoco iba a decirle 'oye, vamos a hablar del problema que hemos tenido'. Solo le iba a dar un abrazo. Me hubiese gustado verlo". También admiten que la petición de Irene a las dos para que no vayan a verlo ha tenido algo que ver: "Imagino que él está de acuerdo".
¿Cómo se enteraron Isa e Isabel Pantoja del ictus?
La hija de Isabel Pantoja también ha confesado que se enteró del ictus de su hermano después de recibir la noticia de un amigo suyo en torno a las diez de la mañana, cuando ella se encontraba en el gimnasio. "Se me viene el mundo abajo, me voy a mi casa, e intento hablar con toda mi familia, aunque en un principio no consigo hablar con nadie y me asusto".
Según la información publicada por el periódico 'Esdiario', Chabelita aseguró que no fue su cuñada quien le confirmó esta situación: "A mi hermano le ha dado un ictus y tengo que saberlo aunque haya sido menos grave".
Irene Rosales no solo no informó a Isa Pi, sino que como dejó ver, tampoco se lo habría dicho a Isabel Pantoja: "La explicación que le dieron a mi madre tendrán que decirla ellos. No voy a contar cómo se enteró ni en qué circunstancias, pero mi madre lo está pasando muy mal. Estamos en contacto y ella está siendo un apoyo para mí y yo estoy siendo un apoyo para ella. Yo también tengo un hijo y a mí madre me duele".
Debido a la escasa o nula información que la hermana de Kiko Rivera tenía sobre el cantante, decidió desplazarse el viernes pasado hasta el hospital para preguntar personalmente por él, porque como ha explicado "si van amigos, ¿no voy a tener más derecho yo a preguntar cómo sigue, que soy su hermana?".
"Me preocupo por él y pregunto por él, y lo que nos ha transmitido Irene es que como somos personas que le alteramos, en el sentido de emocionarle, por recomendación médica es mejor que no vayamos. Pero yo voy como hermana, persona humana que soy, para estar fuera y preguntar por él con toda mi buena intención y si alguien no lo entiende es que queréis muy poco a vuestra familia. No entiendo por qué se me cuestiona a mí que yo vaya. Yo lo siento así y así lo he hecho, no me arrepiento de haber ido", confesó enfadada con las críticas que está recibiendo por acudir al centro sanitario.
"No entiendo cómo hay amigos y familiares allí, que todos van a hacerse fotito por aquí, fotito por allá y mi madre no puede verlo. Siente impotencia al verlo todo desde la distancia porque si va al hospital, donde no es bienvenida, va a provocar una situación incómoda porque no quieren que esté", añadió sin ocultar lo dolida que está con Irene Rosales por no dejar que Isabel Pantoja vaya a visitar a su hijo.