Carla Barber ha contado en su perfil de Instagram el ataque que ha sufrido recientemente al entrar en su portal. Su suegro, Kiko Matamoros, ha asegurado que se trata de algo premeditado.
"Anoche al entrar en mi portal dos chicos me estaban esperando dentro, escondidos. Al subir mis escaleras me atacaron por la espalda y me hicieron la 'llave del mata león' hasta dejarme inconsciente al cortar el riego sanguíneo a mi cerebro presionando la arteria carótida", ha contado Carla.
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"No sé cuánto tiempo estuve inconsciente, creo que algo más de un minuto. Conseguí levantarme y salí corriendo a la calle gritando sin parar. Me indicaron por dónde se habían ido los asaltantes y empecé a correr. Los alcancé, conseguí memorizar la matrícula, modelo y color del coche", ha señalado.
"Estoy bien. Tengo lesiones en cuello y lengua, dolor al tragar y al hablar. Lo extraído (joyas, bolso...) carece de importancia, al fin y al cabo es solo dinero. El miedo al recordar lo sucedido y la angustia de pensar que puede volver a pasarme es lo que importa", ha añadido.
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Unas horas más tarde, el colaborador de Sálvame Kiko Matamoros ha asegurado, en el programa de Telecinco, que los agresores estaban "esperando en el portal de su casa" a Carla Barber.
"Sabían exactamente dónde vivía. La policía puede tener sospechas por dónde vienen los tiros", ha añadido el colaborador de Mediaset sobre el ataque a Carla Barber.
"A mí me parece que ella ha demostrado el perfil que es de mujer fuerte, por su reacción, porque otro se viene abajo", ha dicho Kiko Matamoros sobre la pareja sentimental de su hijo Diego.
" Les mando un beso grande y que estén tranquilos, porque Carla tiene razón: lo perdido son cosas materiales y ahora se trata de esclarecerlo todo", ha sentenciado Kiko Matamoros.
Un robo de 50.000 euros
Los asaltantes se llevaron el reloj que llevaba puesto Carla Barber, cuyo precio ronda los 30.000 euros. También se llevaron un smartphone de 800 euros, un bolso de 1.000 euros y joyas personales.
El montante del robo asciente a 50.000 euros aunque la canaria ha restado importancia a las pérdidas materiales. Asimismo, no está dispuesta a que el miedo gane esta batalla.