Antes de saltar a la tele, Kiko Hernández, que mataba por ser famoso, era agente inmobiliario.
Y por este trabajo tuvo problemas con la justicia: en 2018 fue condenado a seis meses de cárcel por apropiación indebida de 14.000 euros en la venta de un piso.
El portal rosa Informalia cuenta que el tertuliano vuelve por un día a su antiguo empleo para hacer caja con una de sus propiedades más valoradas: "Kiko Hernández a puesto en venta su impresionante piso de Madrid".
"El colaborador, que actualmente vive a las afueras de la capital junto a sus dos hijas mellizas, Abril y Jimena, quiere desprenderse de su piso en el distrito de Chamberí, por el que pide 795.000 euros", añade el citado medio.
Casoplón
Informalia explica que "el inmueble, de una sola planta, se encuentra en la zona de Trafalgar, un barrio con mucha historia en una ubicación privilegiada dentro de un clásico y bonito edificio con portero incluido".
Kiko Hernández hara caja mientras sigue con sus proyectos televisivos: mantiene sus colaboraciones en 'Sálvame' y conduce cada madrugada el espacio de televenta 'Mejor llama a Kiko', que se ve en Telecinco y Be Mad TV.