Kiko Hernández se presentó este miércoles a trabajar en Sálvame sentado en una silla de ruedas y causando un gran impacto a la audiencia y a sus compañeros.
El colaborador, a pesar de sufrir una fuerte lumbalgia, fue reclamado por David Valldeperas para trabajar en el programa de Telecinco y decidió acudir a la llamada aun cuando apenas se puede mover.
¿El resultado? Una escena que ha sorprendido a todos y que ha dado juego en los primeros minutos de Sálvame: "¿Por qué ha venido a trabajar el abuelo de Kiko Hernández esta tarde, qué le pasa a su nieto?", bromeaba Carlota Corredera.
"Tenemos que agradecerle el esfuerzo que hizo ayer y que ha hecho hoy", pidió el director del programa. "Yo creo que ayer no te lo creías mucho", respondía el colaborador.
Problemas de salud
"Os voy a contar lo que pasó. Me llama ayer Kiko a las 11:30 de la mañana y me dice: 'Valde, estoy fatal, no puedo moverme'. Y entonces pensé: día 29 de diciembre, tendrá que ir a hacer sus cositas y éste me está soltando una milonga para que le dé el día libre", comentó Valldeperas. "Le dije que necesitaba que estuviera y me dijo que haría el esfuerzo. Cuando le vi entrar pensé: 'pues tenía razón'. Estaba jodido", comentó, pidiendo un aplauso para él.
Kiko Hernández explicó el problema: "Tengo lumbalgia, esto es por la artritis psoriásica, que ahora me ha dado por la lumbalgia. Sentado no me duele nada, pero me levanto y veo a San Pedro con el bastón", desveló.
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Mila Ximénez no dudó en bromear, al ver que incluso había un fisioterapeuta en plató, con qué iban a llevarle a ella: "Kiko tiene una lumbalgia y le traen un fisioterapeuta... ¿Y a mí por qué no me traéis una UCI?", preguntó riéndose.
"Vamos a ser Heidi y Clarita", anunciaba Carlota Corredera. En las redes sociales, muchos aprovecharon para atizar a Kiko y dejar claro que no es de fiar después de haberse inventado en el pasado un cáncer de páncreas...