El exvicepresidente Oriol Junqueras y el exconseller Raül Romeva han pedido al Tribunal Constitucional la suspensión de sus penas de prisión durante la crisis del coronavirus.
Oriol Junqueras y Raül Romeva quieren sacar provecho de esta situación y han pedido salir de la cárcel hasta que se resuelva el recurso de amparo contra la sentencia del Tribunal Supremo. ("Vergüenza". ¡¡Más de 100 profesores universitarios ponen en su sitio al delincuente Junqueras!!)
Los dos independentistas han señalado que el Estado de Alerta decretado hace dos semanas por el Gobierno español para combatir la enfermedad "elimina cualquier riesgo de fuga".
Asimismo, el exvicepresidente y el exconseller han hecho referencia a las resoluciones de la OMS y del Consejo de Europa, que aconsejan "alternativas a la prisión" mientras dure la pandemia de coronavirus.
"La obligación de confinamiento y prohibición de circulación no justificada hace imposible la sustracción a la justicia, obligación que podría añadirse a cualquier otra que estableciera este Excelentísimo Tribunal dentro de sus facultades, protegiendo en todo caso los derechos del recurrente a no sufrir un daño irreparable", han justificado los abogados de Junqueras y Romeva para pedir su salida de la cárcel.
No es el primero de los condenados por el 'procés' que se ha intentado aprovechar de la situación ya que el presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, pidió su liberación el pasado viernes.
El abogado de Cuixart quiso aprovechar la crisis del coronavirus para pedir a la justicia que le dejasen pasar el confinamiento en su domicilio debido a "la excepcionalidad del momento y del estado de alarma decretado por el gobierno español".
Por el momento, la justicia no ha dado una respuesta a los líderes independentistas condenados por el delito de sedición pero confían en poder abandonar la cárcel durante, al menos, un par de semanas. (Raül Romeva ya anda suelto por ahí (y Junqueras en cualquier momento))
Confinamiento hasta el 11 de abril
Por el momento, el Gobierno español ha decretado el confinamiento de los ciudadanos que residen en España hasta el próximo 11 de abril aunque podría prorrogarse dos semanas más.
El Ejecutivo liderado por Pedro Sánchez quiere tener controlada la pandemia antes de devolver la normalidad al país. Esta transición se hará de forma escalonada.