Alba Santana, la hija de Mila Ximénez, está aprendiendo a vivir sin su madre, fallecida hace unos meses a causa de un cáncer. La colaboradora de Sálvame dejó un gran vacío en la vida de familiares y amigos, como es lógico, y teniendo en cuenta su trabajo muchos de esos amigos son personajes públicos que han vivido el duelo delante de las cámaras. Así, en estos meses se han dado situaciones que han molestado mucho a Alba.
Jorge Javier Vázquez y Kiko Hernández han sido los principales protagonistas de esas situaciones, que han llevado al límite a la hija de Mila Ximénez. Ella entiende más que nadie el dolor que sienten los amigos de su madre, porque la echa mucho de menos. Sin embargo, lo que no puede llegar a comprender es el espectáculo que tanto el presentador como el colaborador han querido hacer con la muerte de Mila, algo que otros colaboradores no han hecho, como es el caso de Belén Esteban o Belén Rodríguez.
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La hija de la difunta colaboradora de Sálvame considera que ambos han hecho show con dicha muerte y se han aprovechado de ella profesionalmente, algo que le ha sentado muy mal. Ella misma ha rechazado ofertas muy jugosas por contar en exclusiva cómo se siente tras la pérdida de su madre, por lo que no le parece bien que otros 'mercantilicen' la situación públicamente, empleándola para sacar tajada. Le ha molestado mucho y ha tenido que parar los pies con un mensaje directo a Sálvame.
Según ha podido saber DonDiario, Alba ha pedido a los amigos de su madre que intenten evitar hablar de ella en televisión. Quiere que la dejen descansar en paz. Ella misma se ha ofrecido para hablar con cualquiera de ellos cuando lo necesiten, pero les ha pedido que, por favor, dejen de hablar de Mila delante de millones de personas. Ni le parece apropiado ni le apetece hacer espectáculo con algo tan grave.
Jorge Javier y Kiko Hernández dieron la nota tras la muerte de Mila
Tras la muerte de Mila Ximénez, tanto Jorge Javier Vázquez como Kiko Hernández protagonizaron escenas dramáticas en Sálvame que no gustaron nada a Alba. No cree que lo hicieran a propósito, y ella se siente de la misma forma, abatida incluso después del paso de los meses. Pero considera que es mejor que en televisión no se trate más este asunto. Son cuestiones personales y la audiencia no tiene por qué ser partícipe.
Jorge Javier Vázquez ha hablado en varias ocasiones sobre la muerte de Mila Ximénez y ha confesado haberla sufrido como si fuera la muerte de una pareja. Por su parte, Kiko Hernández llegó a abandonar los platós durante un tiempo debido a que se juntó la muerte de Mila con la de otra gran amiga suya, Begoña Sierra. El colaborador afirmó sentirse sumido en una depresión, pero una semana después ya estaba nuevamente en el plató.
Este tipo de comportamientos escama a Alba Santana, que no quiere entrar en una guerra con los que fueron los amigos de su madre pero considera que deben parar. De ahí que se lo haya pedido explícitamente.
Si alguno de ellos vuelve a hacer algún comentario sobre Mila Ximénez que pueda entenderse como parte de un espectáculo, Alba tomará medidas más drásticas. Solo quiere respeto por la memoria de su madre y pasar el luto de forma privada.