Es tradición que una vez que acaba el año, se haga balance. Por esto, Jorge Javier Vázquez ha llegado a una conclusión: "a tomar por saco el 2022". El presentador recuerda que el inicio de este año estuvo marcado por la variante del COVID-19, ómicron, también hace referencia a que cuando solo llevábamos dos meses de este 2022 empezó la guerra en Ucrania.
Por todo ello, Jorge Javier le pide a este año que "se vaya con viento fresco" y "que cierre la puerta al salir". Pero también hace balance en lo personal, destaca que, para él, este año comenzó con el final de la gira de 'Desmontando a Séneca' en Madrid, en el Reina Victoria. Según él, una mala época para hacer teatro ya que la gente no estaba para muchas fiestas y eso se notaba en la taquilla.
Relacionado con esta obra, el comunicador catalán hace memoria y nos cuenta que el 13 de enero les costó dios y ayuda realizar la lista de invitados porque "iban cayendo como moscas": el que no tenía covid había estado en contacto con uno.
El presentador de 'Sálvame' no pierde la oportunidad para criticar que nos hayamos acostumbrado a las noticias de la guerra en Ucrania, pero que cuando empezó estábamos impactados. Una guerra a pocas horas de avión de nuestras casas. Bombardeos televisados y con el miedo metido en el cuerpo. No obstante, la vida seguía y la gente, poco a poco, fue recuperando su vida cotidiana.
Según la información publicada por Jorge Javier en su blog de la revista 'Lecturas', el catalán confiesa que guarda un recuerdo agridulce del final de la gira de 'Desmontando a Séneca en Madrid'. Recuerda los viajes a casa, aguantándose las lágrimas, sepultado por el peso de la responsabilidad y pensando en qué hacer para que fuera más gente a verle.
A raíz de esta preocupación por llenar patios de butacas, asegura que se le han quitado las ganas de hacer teatro, que está cansado de hacer exámenes, cansado de estar a la altura de las expectativas de los demás. Y porque este trabajo, por mucho que le guste, es solo trabajo. Lo que Jorge Javier Vázquez le pide al 2023 es vivir.
Por un año de sorpresas
El presentador confía en el 2023 y eso que antes no le gustaban los números impares. Ahora sí le gustan ya que no se considera lógico, se define como anárquico, desordenado, caótico e imprevisible, según él como los impares.
Jorge Javier tiene la esperanza de vivir el próximo año a conciencia ya que se niega a pensar que nada le puede sorprender, que todo está hecho y dar las cosas por sentado.
Aceptar la tristeza
Para terminar su artículo, el comunicador también quiere destacar que en este año no todo ha sido negativo. Ha descubierto que, como cantaba Gracia Montes, es una feria. Que le gusta la diversión y el jaleo, pero que la vida no es solo eso. La vida también es aprender a convivir con todos los sentimientos que forman nuestra existencia, algo que su psicóloga le ha recalcado mucho este año.
Sin embargo, eso es algo que sí ha podido aprender estos 12 meses: convivir con la tristeza, abrazarla y escuchar qué te quiere decir.
Finalmente, Jorge Javier Vázquez deja un mensaje para sus lectores: "No encuentro mejor modo de empezar el año. Ser sincero con la persona con la que vivimos los 365 días del año: uno mismo. Así que, no lo olvides: a por el 2023 con todas sus consecuencias".