Jordi Sánchez ha asegurado desde la cárcel con motivo del aniversario de la breve proclamación de la DUI que recomendó no declarar la independencia y convocar elecciones. Pocos meses después se convirtió en el número dos de su candidatura. Hoy preside el grupo parlamentario de Junts per Catalunya.
El expresidente de la ANC hizo llegar al Govern de Puigdemont que debía convocar elecciones autonómicas como le reclamaba Rajoy para frenar el 155.
Sánchez explicó al juez que condicionó su entrada en JxCat a que el nuevo Govern acatase la Constitución y aseguró que como diputado no volvería a la unilateralidad, según publicó ayer eldiario.es.
El viernes que Catalunya declaró la independencia, el entonces president Carles Puigdemont habló con empresarios, rivales políticos, enviados del Gobierno central y líderes independistas. Todos intentaban convencerle en un sentido u otro, independencia o elecciones, ésta era la duda. Jordi Sánchez era uno de los que le aconsejaba no lanzarse a una declaración de independencia, según declaró ante el Tribunal Supremo el pasado 11 de enero.
Jordi Sánchez asegura que no volverá a la unilateralidad
El 25 de Octubre del pasado año Rafael Ribó, Defensor del Pueblo catalán visitó a Jordi Sánchez a Soto del Real. Según Ribó, Sánchez le manifestó que en su opinión debían ir a elecciones autonómicas y aceptar la oferta de Mariano Rajoy que aseguraba que así podían parar la aplicación del 155.
“Yo en ese momento di mi opinión. Creía que había que iniciar un proceso de convocatoria de elecciones. Como al final ha acabado sucediendo, pero con otro mecanismo menos traumático", afirma.
Jordi Sánchez, en su declaración del mes de enero, ratificó que su opinión era ir a elecciones. Además afirmó que quien le pedía su opinión ya sabía que su oposición a la declaración de independencia había sido la política que habia sostenido siempre.
Sánchez expresó además que el 1 de octubre fue una "movilización ciudadana", tras lo que reclamó ante el juez Llarena un referéndum. Pero entonces volvió a mostrarse contrario a la unilateralidad, hasta el punto de reivindicar que había que "encontrar unos cauces para negociar, no la independencia, sino las reformas necesarias y el referéndum".
Después del 1 de Octubre y mientras el Govern discutía sobre qué tipo de decisión tomar, Sánchez se sumó a la vía que reclamaba el ex presidente Artur Mas, ir a la convocatoria electoral.