James Rodríguez mete una bomba en el vestuario del Madrid... ¡¡y tiene razón!!

James se quejó, públicamente de los minutos que le da Zinedine Zidane.

James Rodríguez mete una bomba en el vestuario del Madrid... ¡¡y tiene razón!!
James Rodríguez mete una bomba en el vestuario del Madrid... ¡¡y tiene razón!!

El futbolista de Colombia estalló, de forma pública, tras asumir su primera titularidad con el Real Madrid en meses.

James Rodríguez ha vivido en el ostracismo y lo condena, de forma deliberada, en su país. ("No vuelve a vestir la camiseta del Madrid": ¡¡Zidane tiene la bomba del verano!!)

Le lanzó un órdago a Zidane, que no ha sentado bien a muchos aficionados, pero lo cierto es que si se agarra a la estadística... tiene razón.

James es uno de esos jugadores diferenciales, que marcan los partidos, y busca asumir la titularidad de forma más frecuente. En los datos está toda la explicación.

James no sabe el motivo de sus suplencias

"No hubo nunca ningún problema. Cada entrenador tiene sus gustos. Tenemos una relación normal, de trabajo. ¿Por qué no juego? Es una buena pregunta, también lo quisiera saber [risas]”.

“Cuando ganas títulos importantes con jugadores en los que has confiado y cuando tienes la base, es difícil cambiar”, comentó James en su reinvindicación.

“También es complicado cuando tu entrenador no te da minutos permanentemente, se hace difícil. Es complejo mostrar tus capacidades teniendo pocos minutos, no puedes hacer todo lo que sabes. Los que están en el mundo del fútbol saben de lo que hablo", argumentó.

Los números le dan la razón

James Rodríguez, con su rendimiento con Ancelotti en 2015, sería titular indiscutible en el Real Madrid. El colombiano logró, en su primer año, unas cifras de altura. (¡¡El Real Madrid tiene ganada esta batalla con el PSG!! Al Khelaifi no tiene nada que hacer...).

Sumó 17 goles y dio 18 asistencias, en su mejor temporada de blanco, antes de pegar la espantada en las cifras en la siguiente. James se deshinchó, pero demostró ser válido para decidir partidos y rotar con mucha frecuencia.

También con Zidane ha logrado grandes estadísticas. En el año del doblete, antes de que se rompiese el idilio entre ambos, consiguió anotar 11 goles y dar 12 asistencias.