“Si dicen que el perro es el mejor amigo del hombre, ¿por qué no irte de cervezas con él?”, comentan las ideólogas de BrewDog.
BrewDow, así se llama la pionera cervecería ubicada en la calle Casanova de Barcelona que quiere potenciar el binomio humanos-perretes.
En BrewDog ofrecen cervezas para perros (Subwoofer), tal y como se puede leer en las etiquetas, las sirven en cuencos y ninguna de ellas lleva alcohol, lógicamente.
Sin alcohol y con extracto de carne
De hecho, la Subwoofer “es lo que queda tras la primera fase del proceso de la cerveza. Le falta la fermentación, la levadura, el alcohol... Le añadimos un extracto de carne que a los perritos les mola bastante”, explica Serena, experta cervecera de BrewDog.
No sufras, los clientes humanos pueden beber cervezas normales…
Punto de unión
“El perro tiene unas necesidades y el humano, otras, pero intentamos encontrar un punto en el que se junten y compartamos tiempo”, explica María Sabater, una de las fundadoras de BrewDog.
Hoy en día puedes ir a una pastelería canina (Snouts), puedes practicar doga (yoga con perros) o ir a un Tinder de animales (Social Animals).
Ahora también te puedes ir de cañas con tu amigo peludo, y casi con total seguridad, él acabará bebiendo más que tú, mirará con cara de perro a la camarera y terminará saliendo del bar a cuatro patas.