Te quedarás perplejo al observar cómo este can es capaz de maullar a la perfección como si fuera un felino.
Y es que se trata de una pequeña cría que está aprendiendo a ladrar, pero por lo que parece la cosa se le está complicando demasiado.
A pesar de que el animal le pone todo el empeño del mundo, este finalmente termina haciendo el mismo sonido que los gatetes.
Morirás de amor al ver el vídeo en el que aparece la pequeña mascota y al que han titulado irónicamente: "Atención perro peligroso".