Belén Esteban lleva prácticamente una semana desaparecida de la pequeña pantalla. Y es que parece que la princesa del pueblo ha decidido tomarse unos días libres para superar el tremendo enfado que tiene con su compañero y amigo antes de volver a los plató de Mediaset.
Un enfado que era provocado por el presentador, quien, sin pedir permiso previo a Belén, decidía mostrar unas fotografías privadas de la colaboradora en directo en Sálvame.
Sin embargo, parece que las fotografías indeseadas persiguen a Belén Esteban quien, paseando este domingo junto a su marido después de comer, ha tenido que vivir un momento fotográfico complicado, tal y como ella misma ha contado después en sus redes sociales.
La hija de Kiko Matamoros y Makoke no toma precauciones en sus vacaciones en México
Y es que, a la salida del restaurante, la esperaban dos fotógrafos: "Todo el día así" ha explicado la colaboradora en sus stories de Instagram "Me parece muy bien, pero lo que no tolero es que el más bajito me insulte y me provoque".
El futuro de Belén Esteban, en el aire
A pesar de que las persecuciones y las fotografías en plena calle nunca han parecido molestar a la de San Blas, que aceptaba la fama de forma casi natural, parece que el paso de los años sin privacidad alguna comienza a pesar a la colaboradora de Sálvame.
Este topless de Tamara Gorro ocupa todo el mural de su oficina
Y es que las fotografías enseñadas por Jorge Javier parecen haber sido la gota que ha colmado el vaso de paciencia de Belén Esteban, que podría estar a punto de dar el paso definitivo de abandonar la televisión. O, al menos, 'Sálvame' y todos aquellos programas en los que tenga que enfrentarse al presentador.
Proyectos para sustituir a Telecinco, aún así, no le faltan: y es que la colaboradora goza con fuertes ofertas de trabajo, entre las que se encuentra la lanzada este verano por Carlos Herrera, así como su propia línea de joyería, de decoración para el hogar, y sus colaboraciones pagadas en las redes sociales.