El mundo del atletismo quedaba boquiabierto esta semana, después de que la joven Ziyah Holman, atleta de la Universidad de Michigan, consiguiera llevar a cabo una remontada casi imposible en una carrera de relevos 4x400.
Holman recibía el testigo de su compañera con cuatro segundos de distancia con respecto a la líder de la carrera en el Simmons-Harvey Invitational.
Una distancia que parecía insalvable; sin embargo, la joven corredora no se dio por vencida, cogiendo tal velocidad, que en la primera vuelta conseguía superar a la corredora en segunda posición y, en el sprint final, dejaba atrás a la que parecía ser la ganadora del encuentro, ante la sorpresa y la admiración de los espectadores.
Efectivamente, Holman conseguía pasar la primera la línea de meta, causando una verdadera oleada de euforia entre los asistentes.
Abrumada ante la lluvia de felicitaciones
"Me siento mal porque todavía estoy respondiendo a todos, pero honestamente es bastante imposible; todavía estoy respondiendo mensajes del sábado" ha reconocido la campeona al diario universitario.
Y es que ella misma ha asegurado que se siente abrumada por la cantidad de mensajes de felicitación que ha recibido a través de las redes sociales ante el éxito de su debut del fin de semana.
Un debut que ha convertido a Holman en toda una estrella del atletismo estadounidense, registrando una marca de 51.79 en los 400 metros; no muy lejos del récord norteamericano de Sanya Richards, de 48.70, que abre las puertas a Holman a ser la siguiente ganadora de las Olimpadas, e incluso, de la carrera por el título mundial.