Gareth Bale está sentenciado. Nadie duda en el seno de la directiva del Real Madrid de su clase, de su tremenda potencia, de su velocidad, ni de su disparo. Pero sus continuas lesiones le colocan en el disparadero. Florentino Pérez ha dicho basta, ha orientado su pulgar hacia abajo y ha decidido que el futuro de Bale no está en el Real Madrid.
Un nuevo Real Madrid sin Bale
Está naciendo un nuevo Real Madrid, un Real Madrid de los jóvenes como respuesta a la salida de la plantilla de Cristiano Ronaldo el verano pasado y la de Gareth Bale, ya decidida, al término de la presente temporada. Florentino estaba convencido de que su fichaje más caro hasta el día de hoy (101 millones de euros) sería capaz de asumir la batuta y erigirse en el líder del Real Madrid tras la marcha de Cristiano Ronaldo.
Pero difícilmente puede convertirse en líder alguien que no disfruta de la regularidad en su juego por culpa de las lesiones. Anoche, en Villarreal, volvió a lesionarse y a influir de forma decisiva en el tropiezo blanco que aleja al equipo de Solari de la liga. Finiquitado el Real Madrid de Cristiano, el Real Madrid de Bale no da el peso.
Después de seis años, sigue sin hablar castellano
A sus 29 años, cumple su sexta temporada en el Real Madrid y sigue siendo un perfecto desconcido incapaz de unir tres palabras en castellano. Sus problemas con el idioma le han impedido integrarse en el grupo como se podía esperar. Y ya es tarde.
La idea de Florentino es colocarle en una de las macroperaciones que tiene previstas para este verano: o bien como torna para Neymar o Mbappé si cristalizan las negociaciones con el PSG, o bien como trueque de Hazard con el Chelsea o preparando el regreso a casa que llevaría a Bale al Tottenham y a Kane al Real Madrid. Florentino quiere sacarle provecho al excelente cartel que todavía conserva Gareth Bale especialmente en Inglaterrra.
22 lesiones en seis años
El Real Madrid necesita nuevos alicientes, caras diferentes que generen una ilusión que Bale no está ya en condiciones de proporcionar. Ayer volvió a lesionarse en el sóleo izquierdo. Era la octava vez en seis años que sufre una lesión en esa zona. Y es la lesión número 22 en un historial médico que presenta un cuadro dramático. 13 veces ha tenido que abandonar el campo dejando a su equipo tirado a causa de una lesión. Y son ya 84 partidos sin jugar por problemas físicos. Demasiados para un futbolista que se encuentra entre los mejor pagados de mundo. Un lujo que ni el Real Madrid ni nadie se puede permitir.
Y además... ¡hipocondríaco!
Además, en el caso de Bale se da el problema psicológico y su condicion de hipondríaco, lo que le lleva a dejar el campo en cuanto nota cualquier ligera molestia por miedo a romperse.
Demasiados aspectos negativos para un jugador que llegó como galáctico, que ha demostrado puntualmente que es un pedazo de futbolista, pero al que las lesiones le han impedido acumular la gloria que sus cualidades innatas merecen. La lesión de Villarreal, en donde el Real Madrid se jugaba la Liga, ha sido la gota que ha colmado el vaso de la paciencia de Florentino Pérez, que quiere cambiar las constantes decepciones de Bale por las alegrías que depare el nuevo galáctico (o galácticos) que incorpore al Real Madrid el próximo verano.