Los agentes de la Guardia Civil han encontrado el cuerpo sin vida de la joven Mayte Cantarero, que desapareció el pasado domingo en la localidad de Rivas Vaciamadrid.
Efectivos del Instituto Armado encontraron el cadáver de la chica de 27 años en una zona situada en la Laguna del Campillo en el Parque Regional del Sureste.
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La voz de alarma la ha dado el equipo de rescate de montaña de la Guardia Civil, que estaba rastreando la zona en helicóptero. Al ver algo extraño han pedido refuerzos para la zona.
Decenas de vecinos se han sumado a las partidas de búsqueda por este paraje, que fue el último en el que se vio con vida a Mayte Cantarero el pasado domingo.
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La chica fallecida, natural de Córdoba, se instaló en el año 2019 en la casa de sus tíos, que viven en Rivas Vaciamadrid. Se trasladó a la capital de España para buscar trabajo.
Las primeras investigaciones señalan que la joven de 27 años murió tras una caída de 10 o 15 metros y los investigadores no descartan ninguna hipótesis aunque no creen que haya sido un homicidio.
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El suicidio, principal hipótesis
Los médicos, tras un primer análisis, han observado golpes y magulladuras propios de una caída en el cuerpo de Mayte Cantarero pero no han apreciado golpes intencionados, puñaladas o disparos.
Se refuerza la hipótesis del suicidio ya que la joven de 27 años no estaba pasando por un buen momento personal y estaba inmersa en una profunda depresión. El equipo de Policía Judicial se ha encargado del levantamiento del cadáver tras la autorización judicial. Ahora se le realizará la autopsia y continuará la investigación sobre las causas de la muerte