El entrenador del Tottenham atraviesa uno de los momentos más complicados para él.
Al parecer su perro ha perdido la vida y tanto él como su familia se encuentran devastados.
Mourinho en sus horas más bajas
José Mourinho se ha sincerado y ha dejado un lado su imagen fría para confesar que sus Navidades están siendo de lo más amargas debido al fallecimiento de su perro.
Lo confesó durante el Boxing Day, una jornada deportiva en la que se concentran todos los partidos de la Premier League. El partido que disputó su equipo contra el Brighton resultó ganado para ellos aunque no pudo celebrar ni saborear la victoria tanto como le hubiese gustado.
Su pequeña Yorkshire de más de 10 años moría dejando un gran vacío en él.
De hecho, en una entrevista a pie de campo, un periodista le preguntó por la Navidad y él respondió: "Mi perro murió y mi perro es mi familia, así que ha sido muy difícil. Pero tenemos que seguir adelante", señalo visiblemente afectado.
En pocas ocasiones hemos visto al técnico luso hacer referencia a su vida privada y es que su carácter reservado ha sido incluso objeto de las críticas en numerosas ocasiones.