El partido de ayer entre el Manchester City y el Real Madrid ha provocado un auténtico terremoto en el planeta fútbol. La valentía y gallardía del Real Madrid, que no cedió ante los constantes embates del conjunto de Guardiola y con su ADN habitual en la máxima competición europea, sale vivo del Etihad Stadium con tan solo un gol de desventaja en la eliminatoria.
La debilidad defensiva en el partido de ida de las semifinales del Real Madrid ha provocado que Florentino Pérez tome conciencia del problema en la defensa. Las carencias que el equipo de Guardiola resaltó en el partido de ayer han despertado al máximo directivo del club blanco, que está acelerando la operación para la contratación del nuevo refuerzo en la zaga: Antonio Rüdiger.
El central germano lleva varias semanas en la órbita del club blanco. Aunque las negociaciones parecen estar cerca del final, con la llegada del partido de vuelta, Florentino Pérez ha comprendido la necesidad de incorporar a un nuevo defensa de categoría y caracterizado por su intensidad y valentía en los partidos, especialmente debido al irregular momento de forma que están atravesando los dos centrales titulares del Real Madrid.
Éder Militão y David Alaba han formado una dupla espectacular durante toda la temporada y se han conformado como los líderes de la zaga blanca, pero los últimos partidos han mostrado una debilidad en la defensa blanca, que ha estado más apurada a la hora de frenar los embates de los rivales y ha necesitado de la ayuda constante de otros jugadores del centro del campo.
Con la incorporación de Antonio Rüdiger, la defensa blanca se reforzaría con un central de primer nivel y muy competitivo, que siempre está conectado al ritmo del partido y que sin duda alguna provocaría que Alaba pasara al lateral izquierdo en sustitución de Mendy, lo que provocaría mayor profundidad y peligrosidad en las subidas del defensor austriaco por el mismo carril que Vinícius Jr.